Ecopetrol no ha sido notificada de investigación de Procuraduría

- Publicidad - Ecopetrol informó que no ha sido notificada de la investigación disciplinaria y la suspensión de tres de sus vicepresidentes anunciada hoy por la Procuraduría por el incidente ambiental ocurrido en el pozo Lisama 158, ubicado en el corregimiento La Fortuna, en Barrancabermeja, Santander. “Una vez se lleven a cabo las respectivas notificaciones, […]

Ecopetrol informó que no ha sido notificada de la investigación disciplinaria y la suspensión de tres de sus vicepresidentes anunciada hoy por la Procuraduría por el incidente ambiental ocurrido en el pozo Lisama 158, ubicado en el corregimiento La Fortuna, en Barrancabermeja, Santander.

“Una vez se lleven a cabo las respectivas notificaciones, Ecopetrol y los funcionarios investigados estarán prestos a acatar las decisiones adoptadas por el organismo de control”, precisó.

Añadió que la petrolera y los funcionarios continuarán colaborando con las investigaciones que adelantan los organismos de control sobre este incidente.

Finalmente, reiteró que ha actuado y atendido esta emergencia con la debida diligencia y oportunidad, sin ahorrar esfuerzos ni recursos, en los frentes técnico, social y ambiental.

La decisión de la Procuraduría afecta al presidente de Ecopetrol, Felipe Bayón Pardo, y su antecesor Juan Carlos Echeverry Garzón, a quienes se les investiga por presunto incumplimiento de sus deberes legales, reglamentarios y funcionales relacionados con la normatividad, política y programas de abandono técnico de pozos en los campos que hacen parte de los convenios con la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH) para la explotación de hidrocarburos en ‘Lisama-Nutría’ y ‘Magdalena Medio’.

La Procuraduría, como medida cautelar, ordenó la suspensión por tres meses de los vicepresidentes de Ecopetrol Héctor Manosalva Rojas, de Desarrollo y Producción; Ricardo Ernesto Coral Lucero, de la Regional Central, y el Gerente de Operaciones de Desarrollo y Producción de Mares, Oscar Ferney Rincón Silva, quienes no habrían dado desarrollo a las políticas que se deben poner en marcha cuando se abandona técnicamente un pozo.

Debido al vertimiento desde el 2 de marzo a la quebrada La Lizama de 550 barriles de petróleo, que se mezclaron con lodos y aguas lluvias, se registró una mortandad de animales silvestres y peces, y afectación de cuerpos hídricos y bosques del Magdalena Medio.

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