El crecimiento económico en los 19 países que comparten el euro se ralentizó, según lo previsto, a principios de 2018, informó la oficina de estadística de la UE, Eurostat, en sus datos preliminares.
El Producto Interior Bruto (PIB) en la eurozona se expandió un 0,4 por ciento en el primer trimestre frente al último de 2017 y un 2,5 por ciento interanual, dijo Eurostat el miércoles.
El dato estuvo en línea con la previsión de analistas, pero bastante por debajo del crecimiento de 0,7 por ciento trimestral registrado en los tres trimestres anteriores.
El dato del sentimiento económico cayó en marzo, pero permaneció sin cambios en abril, llevando a los analistas a pronosticar que la economía de la eurozona retrocedería, pero seguiría en niveles de fuerte crecimiento de alrededor del 2 por ciento interanual en los próximos trimestres.
Sin embargo, era improbable que recuperara el 2,5 por ciento de expansión visto en 2017.
La confianza sufrió en parte por las preocupaciones de una guerra comercial con Estados Unidos, que podría reactivarse si Washington impone tarifas arancelarias al acero y al aluminio procedente de la Unión Europea. La decisión se tomará antes del 1 de junio.
En un comunicado aparte, Eurostat dijo que el desempleo de la eurozona permaneció estable en el 8,5 por ciento en marzo, informó Reuters.
