La economía de EE. UU. se expandió a un ritmo anual de 2.3% en los primeros tres meses de 2018, algo más lento que en los tres trimestres anteriores, pero con un mejor desempeño del esperado.
Los economistas encuestados habían pronosticado un aumento del 2% en el producto interno bruto.
De su parte, el gasto del consumidor, el principal motor de crecimiento, subió solo 1.1% después de un aumento de 4% en el cuarto trimestre que fue el más grande en tres años.
Sin embargo, las empresas tomaron el relevo. La inversión en estructuras se duplicó al 12.3% y el gasto en equipo aumentó un 6.1%. La inversión residencial se mantuvo estable.
El valor de los inventarios, que se suma al PIB, aumentó a US$33.100 millones de US$15.600 millones.
Las exportaciones aumentaron 4.8% y las importaciones se desaceleraron 2.6%. Un déficit comercial más pequeño se suma al PIB. La inflación medida por el índice de precios del PCE aumentó a una tasa anual del 2.7% en el primer trimestre. La tasa interanual de inflación subió hasta el 1,8% desde el 1,7%, reportó MarketWatch.