El Gobierno Petro, a través del Ministerio de Comercio, dejó en firme, en diciembre de 2022, el decreto que definía un arancel de 40 % a las confecciones importadas, como una medida para fortalecer la industria local.
Luego de dos años, y en el marco de la versión número 37 de Colombiatex de las Américas, los empresarios hablan sobre el impacto que ha tenido y si realmente a funcionado para tal fin.
“Estas medidas definitivamente incentivan la producción local, sin embargo, no han sido el único factor para la competitividad de la industria y esto lo estamos viendo a través del consumo interno del país que ha pasado muy estable frente a años anteriores, pero que también ha pasado en todo el mundo en el sector de la moda”, mencionó Sebastián Díez, el presidente de Inexmoda.
A su juicio, estas medidas no son el único factor de competitividad de la industria, “pero es por esto que estamos trabajando en temas de internacionalización, de competitividad empresarial para ayudarle a los empresarios a fortalecerse en el interior, desarrollar nuevos y estrategias productos que permitan llegar al exterior”.
De acuerdo con el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE), entre enero y noviembre de 2024 las importaciones de vestuario y confecciones textiles en Colombia sumaron US$564,7 millones, una cifra que registró una disminución de 2 %, respecto al mismo periodo de 2023.
No obstante, Juan Fernando Loaiza, especialista senior en investigación de Inexmoda, explicó que cuando se analizan “las fuentes del decrecimiento nos encontramos con que las unidades importadas aumentaron un 10 %, mientras los precios disminuyeron un 12 %, lo que nos muestra que aunque el consumidor nacional consume prendas locales (12 de las 20 marcas líderes son propiedad de organizaciones colombianas), también demanda oferta de marcas y grupos internacionales”.
¿Qué dicen los empresarios?
Para Luis Javier Rodríguez, vicepresidente industrial de Expofaro, la empresa que fabrica los jeans de Levi’s, la medida sí ha tenido un efecto positivo en la industria local.
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“Yo pienso que ha funcionado porque eso hace que las marcas que importen traten de hacer una producción de lo que están trayendo hacia el mercado nacional (…) A nosotros sí nos ha funcionado. Hemos visto que hay más gente interesada en hacer las prendas y hay más marcas que nos han venido a tocar las puertas para que les hagamos cosas. Muchas marcas nacionales. Lo que pasa es que nosotros por la operación con Levi’s, por un periodo”, afirmó.
Entretanto, Gustavo Lenis, presidente de Fabricato, afirmó que es un interrogante importante el por qué si hoy en día se tiene el 40 % de arancel para el ingreso de las prendas, “por qué no se ha incrementado la producción en los talleres de confección locales. Y creo que hay una cosa que está influenciando y es por páginas digitales como Temu que venden muy barato y que realmente está afectando las marcas colombianas y que al afectarlas también afecta a los confeccionistas”.
