El dólar en Colombia va a tener que enfrentarse a una serie de condicionales importantes para el segundo semestre del año 2024. Las expectativas de los analistas siguen pendientes de lo que sea el desarrollo de la agenda legislativa que tiene el ejecutivo.
Hay todavía reformas muy importantes, como la laboral, a la salud y de servicios públicos, pendientes de ser debatidas en el Congreso de la República.
Buena parte del apetito de los inversionistas se va a condicionar por lo que pueda pasar con estos proyectos de ley y esto a su vez va a tener un golpe sobre el comportamiento del dólar en Colombia.
Alertan desde los principales analistas del mercado que Colombia sigue transitando por un escenario muy difícil en el que la inversión cae con fuerza y la incertidumbre crece.
Si bien se sopesa en un contexto en el que las reformas no pasarán tal cual lo ha querido el gobierno del presidente Petro, sí habrá una serie de efectos sobre la economía nacional.
Más pronósticos para el dólar en Colombia
Con esto de base, las nuevas expectativas apuntan a que el dólar en Colombia, en el pronóstico más alto, llevaría a que la tasa de cambio supere los $4.100 o incluso pueda rozar los $4.200.
A esto último se le suma el hecho de lo que sea el manejo de las finanzas en Colombia, entendiendo que los mensajes en ese sentido del gobierno Petro apuntan a la posibilidad de no cumplir con la Regla Fiscal.
De hecho, el ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, ha mencionado la posibilidad de flexibilizar esa norma, escenario que se suma a una caída en el recaudo y un recorte en el presupuesto.
Del lado internacional, se prevé que en la segunda mitad del año la Reserva Federal pueda empezar a bajar las tasas de interés lo que genere un fortalecimiento del dólar en Colombia y en economías en vías de desarrollo.
En Colombia, esa baja en las tasas de interés se podría ver con mayor fuerza en estos próximos seis meses del año.
Recomendado: ¿Qué tanto podría subir el dólar en Colombia?
Aunque el Banco de la República ha advertido que tomara las decisiones con base en los datos más recientes de la economía nacional, pero el mercado sí espera una relajación de la política monetaria.