La Cámara Colombiana de Bienes & Servicios de Petróleo, Gas y Energía (Campetrol), en su más reciente Informe de Taladros con corte a diciembre de 2023, expuso que el panorama de la demanda de combustibles (como la gasolina) líquidos en Colombia. ¿Cuáles son las novedades?
De acuerdo con Campetrol, la demanda de los principales combustibles líquidos en Colombia fue de 332 mil barriles por día (KBPD), reflejando un 3,9 % mayor a lo observada en noviembre de 2023, cuando fue de 344,4 KBPD más.
Ahora bien, respecto a diciembre de 2022, según el más reciente balance de Campetrol, la demanda de combustibles líquidos cayó en 6,1 % (21,8 KBPD menos).
¿Cuál fue el comportamiento por tipos de combustibles líquidos como la gasolina?
El Informe de la Cámara Colombiana de Bienes & Servicios de Petróleo, Gas y Energía reveló que, en diciembre de 2023, la demanda de gasolina en el país registró un promedio de 170 mil barriles por día (KBPD), representando un aumento de 10,1 % frente a noviembre de 2023 (15,6 KBPD más).
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Pero en términos anuales, la demanda presentó una disminución de 6,8 %; es decir, 12,4 KBPD menos que lo registrado al cierre de 2022.
Expertos del sector han explicado que, en efecto, las constantes alzas por parte del Gobierno Nacional al precio de la gasolina corriente motor afectaron la demanda de este energético.
Además, han subrayado que, en el pasado, una caída como esta podría verse como un mal signo del comportamiento de la economía del país, pues la premisa le apuntaba a que, a mayor crecimiento, mayor era el consumo de combustibles como la gasolina.
No obstante, con el impulso de las políticas de transición energética y descarbonización de las industrias, esto podría ser un signo de cómo otras alternativas de energéticos más verdes estarían ganando más terreno.
Por su parte, el diésel se ha comportado relativamente estable: pues, la demanda de este energético mostró una baja de 0,04 % -al cierre de 2023- frente a los datos de 2022.
Mientras que la demanda de diésel se ubicó en 150 KBPD, reflejando una caída de 2,6 % en relación con noviembre de 2023 (4,0 KBPD menos).
Además, Campetrol expuso que la demanda de Jet registró 13 KBPD, inferior en 41,3 % frente al mismo mes del año anterior (9,3 KBPD menos) y superior en 5,8 % respecto a noviembre de 2023 (0,7 KBPD más).
Pese a estas caídas, de acuerdo con el más reciente informe de la ACP ‘Mercado de combustibles líquidos en Colombia en un contexto de transición energética’, el consumo de combustibles líquidos continuará creciendo alrededor de 2,5 % anual en la próxima década.
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“En ese sentido, hay una oportunidad para que el sector de combustibles líquidos continúe expandiendo su capacidad de atender las necesidades de consumo de los colombianos, contribuyendo a la reducción de la huella de carbono de sus operaciones y superando los desafíos de la movilidad sostenible y la transición energética”, ha destacado la ACP.
Y, en ese proceso de transición, el sector ha avanzado a buen ritmo inicialmente con el programa nacional de mezcla de las gasolinas y el diésel con etanol y biodiesel, y más recientemente con el desarrollo de biocombustibles avanzados y con proyectos de generación solar en plantas de abasto y estaciones de servicio, sistemas de almacenamiento de energía, instalación de puntos de carga para vehículos eléctricos, estaciones de gas vehicular, investigaciones en hidrógeno, pilotos de mezclas voluntarias de biodiesel y aditivación.
Todo esto para mejorar la calidad de los combustibles a productos de mayor rendimiento y menores emisiones, entre otros logros, según información de la ACP.
Entre las acciones de transición energética en la movilidad se destaca, especialmente, la oportunidad de contribuir a corto plazo a la reducción de emisiones, sin costos fiscales ni inversiones adicionales, aumentando del 4 % al 10 % el contenido de etanol de las gasolinas.
Recientemente, el director de Fedesarrollo, Luis Fernando Mejía, expuso que la decisión del Gobierno Nacional de cerrar la brecha entre el precio doméstico de la gasolina al consumidor fue una buena medida.
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“Esa brecha entre el ingreso al productor y el precio de paridad ya se cerró. Fue una decisión muy responsable que va a reducir, prácticamente, a más de la mitad el déficit del Fondo de Estabilización de Precios de los Combustibles (FPEC)”, manifestó Mejía en un seminario de ANIF.
