La decisión del presidente Gustavo Petro de congelar los peajes le costaría a Colombia más de $1 billón, de acuerdo con una alerta emitida este lunes por la Contraloría General de la República.
Según el ente de control, esto se daría luego del anuncio entregado por el ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, en el sentido de no hacer nuevos incrementos de tarifas durante 2024.
“Los precios de los peajes se están ajustando, este año ya no hay más ajustes”, señaló el titular de la cartera hace unos días.
¿Por qué la decisión de Petro de congelar los peajes le costaría a Colombia más de $1 billón?
El problema, como lo señaló la Cámara Colombiana de la Infraestructura (CCI), es que la Nación aún tiene pendiente realizar un incremento en las tarifas que se pagan por viajar por carreteras.
Según datos oficiales, los peajes todavía tienen pendiente una subida de 4,64 %, correspondiente a la mitad de la inflación del año anterior.
Con este contexto, la Contraloría emitió una alerta en la que señaló que la decisión de Petro de congelar los peajes le costaría a Colombia más de $1 billón.
La cifra resulta de los $610.000 millones que ya se han pagado por haber frenado el alza de 2023, sumado a otros $410.000 millones que se generarían por no volver a subir los precios en los que resta del año.
Según el ente de control, estos recursos “deberán ser pagados por la ANI (Agencia Nacional de Infraestructura) con cargo al Presupuesto General de la Nación”.
De otro lado, la entidad señaló que la expedición del Decreto 050 de 2023, que congeló los peajes en Colombia, se hizo bajo la justificación de no golpear la inflación en Colombia.
Sin embargo, agregó que “su estudio y soporte no ha sido justificado satisfactoriamente por el Gobierno Nacional”.
Incluso, para la Contraloría, el hecho de haber firmado esta norma tendría en riesgo a 11 contratos de concesión viales de iniciativa privada, que son aquellos que solo se pagan con recursos de peajes y no pueden recibir dineros del Presupuesto de la Nación.
En este caso, añadió, “la afectación puede ser aún mayor, dado que no tienen desembolso de recursos públicos y la recuperación de la inversión depende exclusivamente del recaudo de las tarifas de peaje que pagan quienes usan la infraestructura vial”.