Una nueva polémica se dio en Medellín luego que el alcalde de la ciudad, Daniel Quintero, expresara a través de su cuenta de Twitter una propuesta para soterrar algunas estaciones del Metro.
“Presidente Gustavo Petro, Medellín soñaba con que el Metro fuera subterráneo al pasar por las estaciones San Antonio, Parque Berrío y Prado. Las dificultades económicas lo impidieron y hoy son un drama de ciudad. Nos gustaría explorar la posibilidad de soterrarlas con su apoyo”, afirmó el alcalde de Medellín en su cuenta de Twitter.
Presidente @petrogustavo, Medellín soñaba con que el Metro fuera subterráneo al pasar por las estaciones San Antonio, Parque Berrio y Prado. Las dificultades económicas lo impidieron y hoy son un drama de ciudad. Nos gustaría explorar la posibilidad de soterrarlas con su apoyo.
— Daniel Quintero Calle (@QuinteroCalle) February 3, 2023
Petro, a su vez, retwitteó la publicación de Quintero en su cuenta, mostrando así su concordancia con la posibilidad.
La propuesta de Quintero, no obstante, no es una novedad pues en 2021, se dio el inicio de estudios de viabilidad para una nueva línea subterránea por tramos.
Esta línea, denominada S, tendría 24 kilómetros y conectaría en un principio a los municipios de Sabaneta, Envigado, Medellín (El Poblado, Centro, San Germán, Robledo, Castilla y 12 de Octubre) para culminar en Bello.
La inversión en estos estudios asciende a $9.638 millones, tienen curso entre 2021 y 2023 y determinarían el trazado, tipo de construcción, número de personas a movilizar, tecnología, tramos subterráneos, valor de la obra e impacto social y ambiental, informó la Alcaldía de Medellín en su momento.
Las dudas sobre el Metro de Bogotá
La intervención de Quintero surge en medio de la polémica en torno al Metro de Bogotá sobre su financiación y los cambios que han puesto en orillas diferentes al Gobierno Nacional y a Claudia López, alcaldesa de Bogotá.
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Esto ha provocado que existan temores para la obra en caso de que no se acepte la propuesta del presidente Petro de que un segmento de la primera línea del Metro de Bogotá sea subterránea, tal como era su idea cuando fue alcalde de la capital del país.
El Gobierno explicó que, de no ser así, podría no financiar otras obras, tal como dijo el ministro de Transporte, Guillermo Reyes.
El funcionario señaló que, si no se aceptan las modificaciones propuestas, “otros proyectos (…) se van a tener que parar”.
Según él, esta decisión se tomaría porque el Gobierno también financia el 70 % de otros proyectos como el Regiotram del Norte y los cables aéreos en el borde oriental de Bogotá.
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