A semanas de que empiecen las negociaciones oficiales del aumento del salario mínimo en Colombia durante 2023, el debate sobre qué tanto puede aumentar el salario con una inflación disparada marcará la hoja de ruta de la negociación.
De momento, según datos del DANE, la inflación en Colombia llegó al 11,44 % en la variación anual a septiembre.
Lo anterior está en la parte alta de las expectativas de los analistas del mercado colombiano, y afianza la idea de que la inflación en el país podría cerrar por esos mismos niveles.
El punto está en que el indicador es el punto de partida de negociación del salario mínimo en Colombia para el próximo año será una inflación arriba del 11 %, que además es la perspectiva de encuestas como la que elabora el Banco de la República y Fedesarrollo.
Por normativa colombiana, el salario mínimo en Colombia no puede aumentar por debajo del dato de inflación del año inmediatamente anterior, pero hay que tener una variable extra en ese cálculo: el resultado de la productividad total de los factores. Entre este indicador se encuentra, entre otros, el dato de productividad laboral.
Bases de negociación del salario mínimo
Y si bien todavía no se conoce ese indicador a manera preliminar, pues se entrega en noviembre y se entrega en el marco de las negociaciones entre trabajadores, Gobierno y empresarios, hay algunos analistas que ya hacen cuentas.
Desde el equipo de investigaciones económicas del Grupo Bolívar tienen una proyección de crecimiento del 1,7 % para la productividad total de los factores.
Con esto, y preliminarmente, el aumento del salario mínimo estaría un tanto arriba del 12 % para el próximo año.
Aunque hay que hacer una salvedad: en discusiones pasadas se ha argumentado que, con una productividad positiva, no sería necesario un alza del salario mínimo mucho más arriba del dato de inflación.
Mercado laboral e inflación
Esto último sobre la base de que el aumento de la productividad representa mejores perspectivas para el mercado laboral. También sobre la base de que un incremento muy por encima de la inflación aumenta los costos operativos de las empresas en el país.
Sin embargo, en el marco de la discusión, también se tendrá en cuenta que, incluso cuando la productividad total de los factores fue positiva en 2021, el mercado laboral se mantuvo afectado.
Por ahora, la tasa de desempleo en Colombia se redujo al 10,6 % y se ve posible que el indicador llegue a un dígito en un escenario de corto-mediano plazo.
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Otro punto crítico de la negociación está en que un aumento muy fuerte del salario mínimo se traduce en incrementos más altos para algunos precios de la economía nacional, presionando así a la inflación en el país.
Sin embargo, y todavía sin iniciar su discusión dentro del Gobierno Nacional, el ministro de Hacienda explicó que el aumento del salario mínimo en 2023 deberá ir en pro de cuidar a la economía nacional y esto incluye trabajar por disminuir la inflación.
