El impacto de la pandemia en la oferta y la demanda de crédito en Colombia ha sido drástico y el acceso al crédito, medido por el origen de nuevos préstamos, se contrajo de manera significativa, tanto trimestral como anualmente, de acuerdo con el más reciente Informe de Tendencias de la Industria del segundo trimestre de 2020 publicado por TransUnion.
El informe también destacó que el crecimiento de los consumidores con créditos se ha desacelerado, mientras que los indicadores de morosidad parecen mejorar en la mayoría de las líneas de negocio, reflejando el uso generalizado de alivios financieros como períodos de gracia o extensión de plazos por parte de las entidades.
Según la última Encuesta de Dificultades Financieras del Consumidor de TransUnion, los consumidores se están apoyando en estos alivios financieros del Covid-19.
La encuesta, realizada a 1.100 adultos, muestra que 76 % de los colombianos ha experimentado un impacto negativo en sus ingresos en julio, por debajo del 80 % en junio y del 83 % en abril y mayo. A pesar de la ligera disminución de este indicador en los últimos meses, el impacto sigue siendo significativo y está en consonancia con las cifras todavía muy elevadas de desempleo e indicadores de actividad económica negativos.
Con este contexto, no es sorprendente que los consumidores estén menos propensos a solicitar créditos y a gastar, y que las entidades estén reduciendo su otorgamiento. Además, los bancos se vieron obligados a cerrar temporalmente muchas de sus sucursales, cortando un importante canal de originación.
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Los datos del Informe de Tendencias de la Industria muestran que, en los dos primeros meses del segundo trimestre de 2020, las originaciones cayeron significativamente en todos los productos de crédito, con las mayores disminuciones observadas en tarjeta de crédito, para todos los niveles de riesgo del consumidor, seguidas por microcrédito.
En particular en mayo de 2020, las originaciones de tarjetas de crédito experimentaron una caída anual de 90,6 %, mientras que las de microcrédito cayeron en 78,9 %. Estas tasas contrastan con los crecimientos positivos, también anuales, del 18,0 % y el 5,6 %, respectivamente, experimentados en mayo de 2019.
De otra parte, la más reciente Encuesta de Dificultades Financieras del Consumidor reveló que 90 % de los consumidores afectados sigue preocupado por su capacidad para pagar sus obligaciones. De esta manera, los consumidores están cambiando sus hábitos de consumo para enfrentar mejor el impacto negativo en sus ingresos familiares, así como retrasando compras importantes.
El 50 % de los consumidores afectados indica que está reduciendo el gasto discrecional del hogar, mientras que un porcentaje significativo de consumidores indicó que estaba retrasando la compra de una casa (24 %) y un automóvil (16 %).
En línea con la encuesta, los datos del Informe de Tendencias de la Industria muestran que el crecimiento del saldo promedio por consumidor en tarjetas de crédito se desaceleró en el segundo trimestre de 2020, pasando de un crecimiento de 4,2 % en el segundo trimestre de 2019 a un crecimiento del 2,6 % en el segundo trimestre de 2020.
Además, las originaciones de créditos de vivienda disminuyeron significativamente en abril y mayo de 2020, en 73,4 % y 62,9 %, con respecto a abril y mayo del 2019, respectivamente. Los nuevos créditos de vehículo también disminuyeron, en un 93,9 % y 76,7 % anual en abril y mayo de 2020, respectivamente.
Los consumidores siguen siendo proactivos, como lo muestra la Encuesta de Dificultades Financieras, con el 64 % indicando que se han puesto en contacto con las entidades con las que tienen obligaciones para evaluar opciones de pago (un aumento del 63 % en junio y del 60 % en mayo).
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Por otro lado, los datos del Informe de Tendencias de la Industria muestran que el número de consumidores con saldos en mora disminuyó o se mantuvo estable en la mayoría de los productos de crédito, reflejando la amplia provisión de alivios financieros por parte de las entidades.
En particular, las tasas de morosidad de 30 días o más y de 60 días o más para tarjetas de crédito disminuyeron a 4,64 % y 3,84 %, respectivamente, en el segundo trimestre de 2020, de 6,24 % y el 4,42 %, respectivamente, en el segundo trimestre de 2019 (disminuciones anuales de 160 puntos básicos y 58 puntos básicos, respectivamente).
Sin embargo, las tasas de morosidad grave para tarjetas de crédito (90 días o más de mora) aumentaron ligeramente en el segundo trimestre de 2020 con respecto al segundo trimestre de 2019, a 3,32 % de 3,26 %. Este aumento se explica por el hecho de que los consumidores debían tener menos de 60 días de mora al 29 de febrero de 2020 para ser beneficiarios de los programas de alivios.
Como consecuencia de estos programas, menos consumidores se convirtieron en morosos, como se refleja en las cifras de morosidad temprana (mora menor a 60 días). Sin embargo, los consumidores que estaban en mora de 60 días o mayor en febrero de 2020 no eran elegibles para estos beneficios, y por lo tanto, hoy estamos viendo esas cuentas que estaban previamente en mora temprana, progresar a moras tardías.
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