El Índice de Confianza Sectorial (ICS), que mide el optimismo de los empresarios, inversionistas y líderes de opinión en Colombia, aumentó en diciembre un 29,3 % respecto al mes anterior y se ubicó en 40 puntos, rompiendo la tendencia negativa luego de cuatro mediciones consecutivas a la baja.
Así mismo, respecto a diciembre de 2023, el ICS muestra un crecimiento del 25 %, pues para ese entonces el indicador se encontraba en 32 puntos.
Sin embargo, el índice, calculado por la firma Sectorial, deja ver preocupaciones en cinco sectores diferentes por cuenta de una serie de elementos negativos que estarían afectando su desempeño.
En primer lugar, el sector de construcción residencial continúa enfrentando riesgos asociados a la suspensión del subsidio Mi Casa Ya a finales de 2024 debido a que se agotaron los cupos disponibles para las coberturas a la tasa de interés, según el Fondo Nacional de Vivienda (Fonvivienda). A esto se sumaría una disminución en la aprobación de licencias de construcción.
Pero no es el único en problemas. El sector de transporte y logística está afectado por un nuevo incremento que tendrán los peajes y la subida que se viene en el precio del ACPM. El pasado 12 de enero del Gobierno confirmó que empezaría a regir un alza del 5,2 %, correspondiente a la inflación, en los peajes, con lo que se juntaron dos aumentos en menos de un mes, pues el primero de enero se hizo un ajuste del 2,8 % que estaba pendiente desde 2023.
Finalmente, en el sector agrícola hay alertas por los efectos negativos del Fenómeno de La Niña, la inseguridad y el impacto que pueda tener en las exportaciones la puja del presidente estadounidense electo Donald Trump por el Canal de Panamá.
Con amenazas, pero también con oportunidades
El Índice de Confianza Sectorial (ICS) encontró que en los sectores de energía y turismo confluyen una gran cantidad de alertas y también unas mayores oportunidades.
Mientras en el sector energético las amenazas se derivan de las demoras en trámites y licencias que afectan la expansión de proyectos de energías limpias, así como del tope al precio de la energía en bolsa, que afectaría el abastecimiento de energía en los próximos años, las oportunidades se derivan del potencial del país en proyectos de energías renovables.
En el segundo caso, aunque se ha registrado un dinamismo en el ingreso de turistas extranjeros al país y los turistas internos están viajando más, el segmento de hoteles y de agencias de viajes no se ha beneficiado de esa dinámica, especialmente por el auge de las viviendas turísticas.
—