La viceministra de Energía de Colombia, Belizza Ruiz, en el marco del Congreso de Naturgas 2022, recordó que hasta este siete de octubre hay plazo para que las empresas para hacer la renegociación entre generadores y comercializadores para la reducción de tarifas de energía eléctrica.
Según la viceministra, “las respuestas han sido positivas, las empresas que ya han hecho las negociaciones de los contratos han mandado cartas, tanto a la CREG, como a la oficina de Asuntos Regulatorios y Empresariales. Esperamos que al final del día se sumen todas las empresas que atienden el clamor popular de la baja de las tarifas”.
De acuerdo con la funcionaria, el porcentaje de reducción de las tarifas de energía no será ponderado ni será un promedio nacional.
En su lugar, la reducción será desagregada, debido a que las negociaciones son entre comercializadores y generadores, el comercializador entrega el cálculo tarifario en las regiones, entonces va a ser diferenciado.
“No tenemos un valor único y eso va a depender de la aplicación de todas las medidas, no solamente en el contrato bilateral, sino también en reducción en transmisión y distribución”, manifestó la vocera
¿Qué deben hacer los generadores y comercializadores?
La energía eléctrica en Colombia, en 90 % aproximadamente, viene de unos contratos bilaterales privados y el 10 % viene de la bolsa de la energía, allí se pactan y en los contratos privados se acuerdan cláusulas que ellos definen precios y tiempo.
“La idea es que se puedan recalcular esos precios de esos contratos para que sean menores y esa reducción del precio de la generación de compraventa entre generador y comercializador pase a la fórmula tarifaria”, explicó Ruiz.
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Otra medida que se tomó es hacer un recálculo para el segmento de la transmisión y para la distribución, cambiando el valor del indicador IPP hacia el pasado y luego regresar con otro indicador: el IPC hacia adelante.
Además, relató Belizza Ruiz, otra medida que se ha tomado tiene que ver con las restricciones, buscando que las termoeléctricas sean despachadas con una configuración de planta más barata: llamado “eficiente económicamente”.
“Las medidas fueron varias para poder atender cada segmento de la fórmula tarifaria; es decir, el G, el T, las restricciones que es el R”, indicó Ruiz.
Cabe mencionar que, este viernes siete de octubre de 2022, la ministra de Minas y Energía de Colombia, Irene Vélez, publicó en su cuenta de Twitter algunas de las empresas que han optado por participar en la reducción de tarifas, entre ellas están: Isagen, Gecelca, Urrá y AES Colombia.
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Pero también hay otras que han manifestado su voluntad de aportar como EPM (que lo anunció en el Congreso de Andesco 2022) y Celsia.
El papel de los consumidores
¿Cómo se calculan las tarifas de energía eléctrica en Colombia? La cantidad de electrones que una persona usa por el valor tarifario; entonces, si se baja la tarifa, pero se sube el consumo, no se va a ver reflejado en la factura.
“Estamos suponiendo que el mismo consumo que lleva teniendo la gente al multiplicarlo por el factor de la tarifa, pues le dé un valor igual o menor esperamos que sea menor, como les digo, eso va a depender de las negociaciones”, precisó la vocera de la cartera.
Para la funcionaria, si el consumidor sigue usando la cantidad de los recursos que está acostumbrado en la actualidad, es altamente probable que no vea un reflejo en las facturas mensuales.
La funcionaria invitó al uso racional de los servicios públicos, en especial, de la energía eléctrica.
El yugo de los precios, las pérdidas de energía
La viceministra confirmó que, desde el Gobierno, se han reunido con sectores de la costa Atlántica tocando el tema de las pérdidas de energía y los sobrecostos que genera.
“El asunto de las pérdidas no requiere, únicamente, un abordaje técnico. El tema de las pérdidas requiere abordaje también de capacitaciones y educación, porque hay pérdidas técnicas, pero hay no técnicas que no tienen que ver con el sistema eléctrico”, aclaró Ruiz.
Agregó que la cartera es consciente de que hay un sector -o una capa en la sociedad- que requiere resolver sus problemas de marginalidad social y económica para poder dar programas de capacitación y educación, de manera que las personas comprendan la importancia de pagar por el servicio público.
La viceministra recalcó que las pérdidas de energía se pagan en todas partes, no solo en la costa Atlántica, en el componente de la fórmula tarifaria -en el CU- hay una variable que se llama PR que son pérdidas reconocidas.
“O sea, no es que en la costa se paguen en el interior, en todas partes se pagan. Solo que hay unas que se denominan, técnicamente, pérdidas eficientes, porque son las comunes: porque hay cables, equipos, pero una vez se superan, hay que pagar las restantes y se hace todo el país. En la costa, lamentablemente por las situaciones que ya conocemos y otras, hay unas pérdidas no técnicas más altas”, argumentó.
