El presidente de la Cámara Colombiana de la Construcción (Camacol), Guillermo Herrera, habló con Valora Analitik en el marco del Congreso de 2023 del gremio, que inicia este miércoles en Barranquilla y tiene como fin ponerla la lupa al sector de la vivienda.
El directivo se refirió a los temas del evento, pero también a la crisis que vive el sector, las perspectivas para el cierre de año y lo que espera para 2024.
¿Por qué el Congreso de este año de Camacol tiene como ejes la transformación, la equidad y la sostenibilidad?
Primero, la transformación por la coyuntura actual, los cambios y los retos importantes que ha tenido la política de vivienda, pero además las tecnologías que han venido permeando el sector nos van a llevar a hablar de cómo se pueden generar otras oportunidades de negocio.
Además, nos permitirán saber cómo transformar el sector con la tecnología con nuevas tendencias demográficas de consumo de vivienda y, sobre todo, cómo trabajar y ayudar al Gobierno Nacional a cumplir con su meta de construcción de vivienda.
En cuanto a equidad, hablaremos de cómo promover más participación de la mujer en un sector que es bastante masculinizado, sobre todo desde las ofertas laborales que se generan en la construcción.
Y en sostenibilidad, sin duda, continuar en la línea que viene impulsando este gremio para que cada vez más viviendas en Colombia cumplan con criterios de sostenibilidad, que les permitan a los compradores gastar menos en consumo de agua de energía y tener mejores materiales.
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¿Cómo va esa transformación del sector de cara a estos ejes?
El sector se está transformando completamente y va a la par de las necesidades y los cambios demográficos, de los gustos del consumo de los ciudadanos que demandan vivienda y edificaciones para otros usos en el tema de la sostenibilidad.
Ya venimos hace años impulsando la construcción de viviendas verdes en Colombia, de hecho, hemos trabajado con el Banco Mundial y Camacol es líder en la implementación de la certificación EDGE en Colombia y somos líderes a nivel mundial.
Tenemos más de 13 millones de metros cuadrados ya certificados que cumplen ambientalmente y cerca del 80 % de esos son de viviendas de interés social, que nos ponen como el país líder, por lo menos, en ese ranking del Banco Mundial
Sin duda, esto le apunta a cumplir con esas metas de reducción de gases efecto invernadero que definió el país de aquí al año 2035.
El sector está pasando aceite, ¿cómo van y qué hacer?
El sector ha venido enfrentando, como lo han hecho todos los agentes económicos en el país, un momento económico complicado, caracterizado, básicamente, por el incremento en las tasas de interés, en este caso las tasas de interés para los créditos hipotecarios que han venido desestimulando la compra de vivienda.
También hemos enfrentado retos importantes con la implementación de las nuevas políticas de vivienda de interés social y con los cambios que se han introducido a Mi Casa Ya.
Y ha habido dificultades grandes en la programación y en el giro de los recursos para el desembolso del subsidio en entre el cambio de los dos gobiernos.
Todo esto nos tiene hoy en una coyuntura complicada, por lo menos las cifras nos muestran que entre enero y agosto de este año tenemos la mitad del mercado, que teníamos un año atrás, es decir, que las ventas de vivienda y los lanzamientos de proyectos se han reducido a la mitad.
Se dejaron de vender cerca de 86.000 viviendas, menos que lo que teníamos un año atrás y eso implica menos inversión en la economía: son cerca de $16 billones que ya no van a estar moviéndose como inversión y como elemento para impulsar el desarrollo, el crecimiento y, sobre todo, el empleo.
Por el lado de las iniciaciones, vienen cayendo en un nivel por encima del 20 % y acumulamos ya ocho meses continuos de reducción en este indicador muy importante, que es el que determina el empleo o la oportunidad de empleo en el sector de la construcción.
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¿Esto se ha visto reflejado en otros sectores atados a la construcción?
Sí, son más de 30 sectores económicos que están vinculados a la construcción y producción de vivienda en el país y que empiezan también a ver en sus indicadores crecimientos negativos en producción y ventas.
Esto pasa, por ejemplo, con el caucho, los vidrios y otros insumos importantes como la producción de concreto. Pero, además, está afectando a las microempresas y micronegocios que son unidades económicas con hasta nueve empleados, es decir, la economía popular que es muy importante para este gobierno. Desde hace un par de meses han visto como sus ventas se reducen por el orden de menos 20%.
Este sector es líder para la reactivación y claramente han venido produciéndose unos anuncios muy importantes, pero creo que hay una discusión de fondo que se tiene que dar en el presupuesto del 2024 para ver si hay suficiencia de recursos para cubrir las demandas de subsidio de las viviendas que se han venido vendiendo en los últimos tiempos.
Hace poco se hicieron anuncios del Gobierno, Findeter y el Fondo Nacional del Ahorro, ¿ustedes lo recibieron bien?
Sí, son importantes anuncios que ha hecho el Gobierno Nacional, que en una parte tiene una inyección de dinero, orientado a proteger el tejido empresarial con unas líneas de crédito o de tasas de redescuento para el crédito constructor.
Muy importante, sin duda, pero que va orientado a la oferta y en el caso del Fondo Nacional de Ahorro unos subsidios para unos 6.000 afiliados del fondo con una inversión de $500.000 millones.
Pero, de otro lado, lo que hemos planteado, que es muy importante, es que el próximo año de acuerdo con las proyecciones que hemos revisado con Asobancaria y diferentes fuentes de información, nos muestran que se van a requerir cerca de 70.000 subsidios para las viviendas que se proyecta entregar.
Es decir, de Mi Casa Ya, que incluye subsidios a la cuota inicial y cobertura a la tasa de interés. Sería una señal muy importante poder saber si se va a tener esa suficiencia de subsidios, porque eso es lo que nos permite seguir impulsando las preventas y generar confianza entre todos los actores.
Sobre todo, en el sector financiero que son los que financian los proyectos y son los que colocan los créditos hipotecarios. Creo que eso es muy importante para ir impulsando este sector en el camino de la reactivación económica, que es lo que requiere el país y evitar el daño de pérdida de empleos.
¿Cómo ve Camacol el sector de vivienda para el 2024?
Esperamos que todo este esfuerzo y todo este trabajo que se ha venido haciendo desde el Banco de la República con la intervención de las tasas de interés para controlar la inflación, podamos ver su impacto.
Pero, sin duda, eso va a requerir una transición de tiempo para poder volver a unos niveles de tasas de crédito hipotecario como los que teníamos un año atrás y por eso es tan importante mantener la suficiencia de subsidios.
Seguramente, hace un año, alguien que quería comprar vivienda de 100 salarios mínimos, $116 millones, le pedían 20 % de cuota inicial, como unos $25 millones y un crédito por ahí de $92 millones.
Hace un año, sin subsidio, un hogar que quisiera pagar esa vivienda tenía que pagar una cuota de crédito hipotecario por ahí de $900.000 y te pedían por lo menos dos salarios y medio de ingreso.
Hoy, ese mismo hogar sin subsidio, si quiere comprar esa vivienda ya no tiene una cuota de 900.000, sino seguramente $1,3 millones o $1,4 millones y te piden un salario más de ingresos, es decir, cerca de 3,5 o 3,6 salarios de ingreso.
Si tú tienes el subsidio, en este contexto de tasas de interés altas, ese hogar va a requerir dos salarios de ingreso y termina pagando $600.000, por eso es tan importante la suficiencia de subsidios para que todos esos 70.000 hogares que compraron vivienda puedan garantizar su cierre financiero y pagar una cuota hipotecaria que no les afecte su bolsillo.
Yo creo que está en el interés de todos, del gobierno y de nosotros en el sector empresarial promover que cada vez más hogares de menores ingresos puedan acceder a una mejor vivienda de interés social pagando menos cierto sacando menos de su bolsillo para pagar unas cuotas que sean bastante asequibles.
¿Cuál ha sido el papel de Camacol para lograr esto?
Desde el gremio estamos pensando que también hay que educar y contarles a los colombianos todas las posibilidades que tienen para adquirir vivienda y es un trabajo que vamos a empezar a hacer.
Yo les diría a los colombianos que es muy importante organizarse, mirar su capacidad de ahorro para poder comprar una vivienda, empezar a buscar y preguntar y sin duda están muy pendientes nosotros en Camacol porque vamos a hacer alianzas importantes para contarle a los colombianos con su nivel de ingreso, cómo puede hacer para que le rinda más la plata para comprar vivienda.
Estamos trabajando con el Gobierno y hay un paquete importante de subsidios que se ha planteado en el Plan Nacional de Desarrollo y, como les decía, aquí lo importante y en lo que todos estamos de acuerdo es que los compradores de vivienda que van a acceder a una vivienda en el 2024, 2025 y 2026 puedan tener un cierre financiero que les permita pagar sin tener que gastar más del 30% de su ingreso mensual.
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