En la sesión de Comisión de Comunicaciones de la Comisión de Regulación de Comunicaciones (CRC), del 28 de enero de 2021, se concluyó que, en primera instancia, Claro Colombia tiene la dominancia como proveedor de telefonía celular, el cual corresponde a la prestación conjunta de los servicios de voz y datos móviles.
Además, la CRC expuso que, de igual forma, se abstuvo de imponer las medidas particulares que fueron analizadas durante la actuación y continuará con el monitoreo del mercado en el marco de sus competencias.
Hay que decir que, de acuerdo con la ley colombiana, la dominancia es una declaratoria preventiva, no es una sanción, sino una declaración de una situación de mercado. Las medidas tanto de la CRC como de la Superintendencia de Industria y Comercio, como autoridad de competencia, podrán ser propuestas cuando se deba prevenir abuso de dicha posición.
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Cabe resaltar que, según la Comisión, contra esta decisión procede recurso de reposición, el cual puede ser interpuesto por Claro Colombia dentro de los diez días siguientes a la notificación del acto administrativo que decidió la actuación en primera instancia.
Al respecto, Claro Colombia explicó que “recibió con extrañeza la decisión de la Comisión de Regulación de Comunicaciones” y destacó que, hasta el momento, desconoce el contenido de la resolución de la CRC para lo cual se notificará oportunamente.
Adicionalmente, recalcó que la decisión se basa en el análisis de la información de la compañía de hace más de cinco años. “La CRC toma esta decisión en primera instancia, sin que exista evidencia alguna de una falla en el mercado, como lo ratificó la Superintendencia de Industria y Comercio (SIC), máxima autoridad de competencia del país. Por el contrario, la CRC tiene abundante evidencia de que el mercado opera bien. Esto lo demuestra, entre otros, la llegada de un nuevo operador al mercado, que hoy ya cuenta con 12 prestadores de servicio.”, reveló Claro en un comunicado.
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La compañía alegó que la reciente decisión, no sólo castiga y desincentiva las inversiones de Claro en el país, sino que beneficia a las empresas competidoras que buscan regulación que les permita no invertir en Colombia, dilatar la subasta de 5G y, en algunos casos, vender sus activos y operaciones en el país.
Al respecto, Tigo indicó que “creemos en la importancia de avanzar con el gobierno en la definición del mejor marco que ayude a hacer que la conectividad sea más asequible y promueva el desarrollo digital y económico del país. Ratificamos nuestro compromiso en el 2021 de seguir invirtiendo de manera intensiva en el país”.
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