La codirectora del Banco de la República de Colombia, Bibiana Taboada, se pronunció acerca del incremento esperado para el salario mínimo de cara al próximo año.
De acuerdo con la experta, el banco central deberá observar minuciosamente la cifra que sea aprobada por la mesa de concertación entre empresarios, el Gobierno y los sindicatos a finales del año.
“Tenemos que observar muy de cerca qué pasa con el salario mínimo, porque ello indicará de alguna manera qué tanta persistencia inflacionaria vamos a tener el próximo año”, dijo Taboada en entrevista con Bloomberg Línea.
Cabe resaltar que la fecha máxima para que se apruebe el incremento del salario mínimo es el 30 de diciembre de cada año. Si no se logra un consenso, aumentaría por decreto del Gobierno Nacional.
¿Qué tanto podría afectar el salario mínimo la inflación?
En las declaraciones de la codirectora del BanRep se resaltó que el salario no debería aumentar de manera significativa debido a que afectaría la inflación del país.
«Claro que hay que ajustar los salarios cuando hay inflación, el problema viene cuando esos ajustes son mayores que la inflación observada como ha ocurrido en los últimos años”, dijo.
A su turno, mencionó que con lo que ha venido pasando en los últimos años, en cuanto a los ajustes salariales se han generado mayores niveles de indexación.
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“Eso de alguna manera lo que termina siendo es, sobre todo en una economía como la colombiana con altos niveles de indexación, un generador de espirales inflacionarias muy fuertes, que resultan en una persistencia inflacionaria muy alta, lo que hace efectivamente más difícil la labor de la política monetaria», agregó.
Esto a su vez, dijo, será determinante para el ajuste que espera el equipo técnico del Banco de la República para el próximo año en temas de tasa de interés.
“Observamos lo que ocurre en el salario mínimo para tratar de entender cómo será la convergencia a la meta y cómo pueden continuar los recortes de la tasa de interés”, agregó.
Sin embargo, destacó que para la reunión de la Junta del banco central del próximo 30 de septiembre se espera que el emisor tenga en cuenta el comportamiento de la inflación para tomar otra decisión sobre la política monetaria.
“Todavía hay algunos elementos que generarían inquietud. Dentro del IPC yo destacaría el tema de servicios (…) A pesar de que el pico de inflación de servicios no fue tan alto como el pico de inflación de bienes, el ritmo de convergencia otra vez a la meta ha sido muy lento. O sea, la inflación de servicios se mantiene, llegó a un punto de 9 % y hoy está escasamente debajo de 8 %”, mencionó Taboada.
Entre tanto, resaltó que a pesar de que la inflación mensual en agosto fue del 0 %, en septiembre se verá un repunte por cuenta del paro camionero que se presentó en el país.
«Si hay algo que realmente afecta la inflación son esos bloqueos. Mucho más que lo que afecta el incremento del ACPM que, además, vale decir es algo necesario. El precio de ACPM ha estado congelado desde 2020, con unos efectos fiscales muy, muy preocupantes. Y sí, tiene algunos efectos inflacionarios, pero efectos que son creo yo bastante reducidos o marginales y que ya estaban contemplados por el equipo técnico del banco, los analistas y el mercado», puntualizó.
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