Las naciones líderes en el uso de energías renovables son China y Reino Unido, además de los Estados miembro de la Unión Europea, de acuerdo con un estudio de la consultora Moody’s.
La entidad estudió la implementación de políticas sostenibles en las 15 principales economías y encontró que las determinaciones que apuestan a una visión sostenible a largo plazo se encuentran en estas naciones.
A esas medidas se le suman incentivos económicos para fortalecer la inversión en el ámbito de energías renovables. En contraste, dicen, encontraron que otros países han tenido políticas “inconstantes” en este asunto.
China es el líder global en estas iniciativas; al país asiático la calificadora le otorgó el puntaje de “A1 estable” en este factor. Le sigue la Unión Europea, con una calificación “Aaa estable”, y Reino Unido con “Aa3 estable”.
Consideran que esas categorías beneficiarán a fabricantes de equipos como Jinko Solar y Vestas Wind Systems, ambos ubicados en China, y Ørsted, de Dinamarca.
Sobre Estados Unidos, dicen que el país se quedó “atrás de sus pares mundiales”, debido a las pocas políticas federales y las inconsistencias en el ámbito de impuestos destinados al sector.
Sin embargo, destacan que ha habido un apoyo desde las autoridades estatales a la implementación de políticas que fortalezcan las energías renovables.
Otros de los países que han tenido un desarrollo destacado en el sector son Australia, Brasil y Turquía, debido a sus medidas para facilitar la transición de energías basadas en carbono a otras más limpias.
Destacan, igualmente, que Arabia Saudí, India y Taiwán han tenido metas ambiciones en este ámbito. En contrate, señalan que otros como México y Rusia se están quedando atrás.
En México se está tramitando una ley para reformar el sistema eléctrico del país que aumentará los costos de producción y reducirá la generación a partir de fuentes más limpias como el gas.
“Todas las economías más grandes del mundo tienen el objetivo de expandir la electricidad renovable o limpia, generalmente durante los próximos cinco a diez años”, escribió Moody’s.
Esas metas para conseguir la descarbonización se sustentan en los compromisos en el ámbito internacional con el Acuerdo de París.
Parte del retroceso de Estados Unidos en ese ámbito se explica en que la anterior administración de la Casa Blanca retiró al país del tratado mundial en noviembre de 2020.
Sin embargo, el nuevo mandatario Joe Biden pidió su reingreso en enero de 2021.
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