Cerca de 1.500 simpatizantes del expresidente de Brasil, Jair Bolsonaro, fueron detenidos tras la toma de las sedes de los tres poderes en Brasilia el domingo, 8 de enero.
Este lunes, 9 de enero de 2023, el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, se reunió con los poderes públicos mientras cerca de 1.500 personas eran detenidas.
Los ciudadanos fueron aprehendidos por la toma del Congreso, el Tribunal Supremo y el Palacio Presidencial el sábado.
Los simpatizantes de Bolsonaro buscaban una intervención militar para derrocar al presidente de izquierda, que se posesionó el primero de enero de 2023.
Atendiendo a lo anterior, este lunes, los poderes públicos de Brasil, encabezados por Lula, rechazaron los actos vandálicos ocurridos en Brasilia.
Así, en una declaración conjunta, los jefes del Senado, la Cámara de Diputados y del Supremo Tribunal Federal rechazaron los «actos terroristas, de vandalismo, criminales y golpistas» en Brasilia.
«Convocamos a la sociedad a mantener la serenidad, en defensa de la paz y la democracia», señalaron en un comunicado.
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Cabe recordar que los edificios en la Plaza de los Tres Poderes, ubicados en Brasilia fueron invadidos durante casi cuatro horas por simpatizantes de Bolsonaro.
Las imágenes de lo ocurrido en Brasil recordaron el asalto al Capitolio por simpatizantes de Donald Trump en Estados Unidos.
