La economía colombiana crecerá 2,5 % este año, una tasa superior a la de los dos últimos años (0,6 % en 2023 y 1,8 % estimado para 2024) y también a la vista antes de la pandemia (2,4 %), según las proyecciones de la firma de análisis de datos de Fitch Solutions, BMI.
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Esto significa que el crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) se acelerará después de dos años de debilidad. Este resultado estaría impulsado por el consumo privado, el cual se convertiría en el principal motor de crecimiento.
Para esto es clave que la inflación siga disminuyendo y el ingreso de los hogares aumente producto de la mejora en el acceso a empleo, según Ashkan Khayami, analista senior de riesgo país para América Latina en BMI.
De hecho, un Índice de Precios al Consumidor rígido, como lo califica la firma, que conduce a que las tasas de interés sean altas, es uno de los principales riesgos que enfrentará Colombia este año, según la presentación hecha en el marco del webinar “Temas macroeconómicos clave de América Latina para 2025”.
Sin embargo, la mayor amenaza para el desempeño económico de 2025 es el balance fiscal. BMI anticipa que el déficit fiscal en Colombia seguirá siendo amplio, a pesar de los intentos del Gobierno por reducir la cifra y mejor la acumulación de deuda, pues pasará de un -5,7 % del PIB en 2024 a un -4,9 % este año.
Khayami cuestionó que el presidente, Gustavo Petro, decretara el presupuesto para 2025 de forma unilateral, a pesar de las advertencias hechas en el Congreso de la República, donde fue discutido previamente. También insistió en que el Gobierno no tiene cómo financiar los $511 billones que calcula gastar debido al rechazo a la ley de financiamiento en el legislativo.
En relación con otros indicadores de la política fiscal, la firma proyecta que los mercados presionarán al presidente para que endurezca las medidas, pues los ingresos estarían solo un poco por encima de los registrado en 2024, dado que los problemas de recaudo de impuestos persistirán.
Finalmente, el analista se refirió a la impopularidad del presidente, la cual se ha mantenido por encima del 50 % en los últimos meses, y la atribuyó a sus alegaciones en conflictos internacionales y a los intentos fallidos de tramitar reformas económicas y sociales, por lo que ve difícil que logre levantar su imagen a punta de políticas.
De cara al futuro, la lectura de BMI a las encuestas electorales lleva a la firma a concluir que los candidatos de centro están mejor posicionados y reciben más apoyo popular, lo que sugiere que las personas están más alineadas con otras prioridades, como la seguridad.
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