En un reciente análisis de mercados de capitales en Latinoamérica, Bank of America (BofA) destacó las oportunidades y riesgos en la región, pero dejó en claro que Colombia no figura entre sus opciones de inversión preferidas.
Según el informe, la incertidumbre política y las dudas sobre la política energética del país son los principales factores que alejan a los inversionistas. Mientras tanto, Brasil, Argentina y Chile captan mayor atención, aunque con matices.
Latinoamérica en el radar, pero con exclusiones
A pesar de las tensiones comerciales globales y la incertidumbre en torno a los aranceles impuestos por Estados Unidos, Latinoamérica ha mostrado un desempeño sólido en lo que va del año, con un crecimiento del 13 % en sus mercados de valores, superando al S&P 500 (-4 %) y a los mercados emergentes en general (+4 %). Sin embargo, BofA indica que este crecimiento no se distribuye de manera uniforme en la región.
Bank of America mantiene una posición overweight (sobreponderar) en Brasil y Argentina, mientras que reduce su exposición a México y Chile. En el caso de Colombia, el banco no tiene exposición alguna, citando la incertidumbre política y los riesgos asociados a la política energética como las principales razones.
Colombia: fuera del radar
A pesar de un repunte del 23 %, el índice MSCI Colcap de la Bolsa de Valores de Colombia en términos de dólares en lo que va del año, no logra captar el interés de Bank of America. «No tenemos exposición a Colombia debido a las incertidumbres en la política energética y el ruido político», señaló el banco.
Además, el informe destaca que el mercado podría estar anticipando un gobierno más amigable con los mercados tras las elecciones presidenciales de 2026, pero esto no es suficiente para compensar los riesgos actuales.
Entre ellos, se mencionan la volatilidad en los precios del petróleo y el deterioro fiscal, factores que podrían limitar el crecimiento económico y la confianza de los inversionistas.
Brasil y Argentina: los favoritos de la región
Por el contrario, Brasil y Argentina son los mercados preferidos por Bank of America en Latinoamérica. En el caso de Brasil, el banco mantiene una posición de “overweight”, destacando industrias con crecimiento resiliente en ganancias y valuaciones atractivas.
Aunque reconoce riesgos como el deterioro fiscal y el ruido político, considera que la desaceleración económica podría abrir la puerta a recortes en las tasas de interés, lo que beneficiaría a sectores como los seguros y las constructoras de viviendas de bajo ingreso.
En Argentina, el banco también mantiene una posición de “overweight”, a pesar de ser el peor desempeño en la región este año, con una caída del 11 % en dólares.
Bank of America es optimista respecto a la recuperación macroeconómica, la desinflación y la reducción de riesgos regulatorios, lo que podría impulsar industrias clave como la banca y la energía.
México y Chile: oportunidades con cautela
México, por su parte, recibe una calificación de “marketweight” (ponderación neutral) por parte de Bank of America. Aunque el banco reconoce las oportunidades derivadas del nearshoring (relocalización de cadenas de suministro cerca de Estados Unidos), advierte que las discusiones sobre aranceles, la desaceleración económica esperada para 2025 y las reformas constitucionales podrían pesar en el sentimiento de los inversionistas.
Chile, aunque ha mostrado un fuerte desempeño este año con un crecimiento del 19 % en el índice IPSA de la Bolsa de Santiago en términos de dólares, sigue siendo un mercado “underweight” (infraponderado) para Bank of America. El banco tiene exposición a través de Santander Chile, pero advierte sobre los riesgos asociados a las reformas y el ruido político.
Riesgos regionales y perspectivas futuras
El informe de Bank of America subraya que, aunque Latinoamérica ha mostrado resiliencia, los riesgos políticos y económicos siguen siendo significativos. En particular, la incertidumbre fiscal, la volatilidad en los precios de las materias primas y los cambios regulatorios podrían afectar el desempeño de los mercados en el corto y mediano plazo.
Para Colombia, el mensaje es claro: mientras no se resuelvan las incertidumbres políticas y energéticas, el país seguirá siendo excluido de las carteras de inversión de grandes actores como Bank of America. Esto representa un desafío para el gobierno y el sector privado, que deberán trabajar en conjunto para restaurar la confianza de los inversionistas y posicionar al país como un destino atractivo para el capital extranjero.
**Este artículo fue creado usando inteligencia artificial (IA) para resumir los aspectos más importantes. La curación de los contenidos fue realizada por Rodrigo Torres, director de Valora Analitik.
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