Los analistas económicos se debaten por estos días entre si el Banco de la República dejará la tasa de interés inalterada en 9,50 % o si se inclinará por un tímido recorte de 25 puntos básicos (pb) este viernes en la reunión de la Junta Directiva, principalmente por el aumento en las expectativas de inflación.
Aunque el Emisor daba por hecho que este año la variación del Índice de Precios al Consumidor (IPC) regresaría al rango meta de entre 2 % y 4 %, desde finales de 2024 el mercado viene anticipando que no será así y que se completarán cinco años por encima de los valores de referencia.
Incluso las encuestas de expectativas más recientes del Emisor y Fedesarrollo reflejan cómo las previsiones pasaron del 3,9 % en promedio en diciembre a más del 4 % en enero de este año, por lo que se espera que el banco central anuncie también actualizaciones en sus proyecciones por parte del equipo técnico.
Para el grupo de Investigaciones Económicas del Banco de Bogotá, el repunte en las previsiones de inflación es un argumento suficiente para que la mayoría de la Junta decida dejar las tasas quietas. Sin embargo, esta misma oficina en Bancolombia cree que un recorte de 25 pb iría en línea con la cautela que ha predominado en las decisiones.
Pero, este no sería no sería el único factor que generaría incertidumbre, también se evaluarían factores como las crecientes tensiones comerciales con Estados Unidos y el efecto del incremento del salario mínimo en la economía al momento de tomar la decisión.
Respecto al primer punto, el Banco Itaú moderó su pronóstico de un recorte dividido de 25 pb hasta el 9,25 %: “A la luz de estos recientes acontecimientos consideramos que el BanRep podría inclinarse por hacer una pausa”, consignó en su informe de inicio de semana, en el cual evaluaba el impacto de la crisis diplomática del domingo en medio de la deportación de colombianos con estatus migratorio irregular.
Sobre el efecto del salario mínimo, el ministro de Hacienda, Diego Guevara, dijo en entrevista a Bloomberg Línea que será el principal tema para continuar o pausar el proceso de recortes en tasa en la sesión del viernes, a pesar de que los altos incrementos de los últimos años en la remuneración básica no han provocado aumentos significativos en los datos de inflación, según su análisis.
Guevara es de los que prevé que varios miembros voten a favor de una pausa en el ajuste, pero también anticipa que, a partir de marzo, la llegada de los nuevos codirectores inclinará la balanza a favor de recortes más profundos, en línea con la visión del gobierno de relajar la política monetaria.
En ello coincide el Banco de Bogotá: “con una alta probabilidad, los recortes de 50 puntos básicos (pb) en la tasa podrían retomarse en marzo, cuando la nueva Junta tome su primera decisión. Esto, en la medida que, en diciembre, cuando las condiciones financieras ya eran más adversas, la votación fue 5-1-1, con dos disidentes por -50 pb y -75 pb”, detalló en un análisis.
En la misma línea se ubica Bancolombia: “anticipamos que los cambios de febrero podrían derivar en nuevos recortes de 50 pb en las reuniones posteriores, siempre que el balance de riesgos macroeconómicos lo permita”, indica su informe de expectativas.
La encuesta de ANIF Tasa Banco de la República de enero muestra un consenso mayoritario entre los analistas consultados a favor de continuar los recortes, pues de las 21 entidades consultadas en total, sólo tres prevén que la Junta Directiva mantendrá la tasa en 9,5 %, nivel establecido en diciembre del año pasado.
Además, el sondeo deja ver que la mayoría (13 firmas) recomiendan un recorte de 25 pb, mientras que cuatro de ellas sugieren que sea de 50 pb. También esperan que, al momento de votar, dos miembros estén en disenso: Olga Lucía Acosta y Diego Guevara.
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