Camilo Pérez, jefe de investigaciones económicas del Banco de Bogotá, entregó los principales pronósticos de la actividad macroeconómica de Colombia en 2022.
En un primer momento, Pérez aclaró que Colombia, así como el grueso de América Latina, se enfrenta a escenarios que podrían presionar con mayor fuerza a la baja el crecimiento de la economía.
“Hay dos focos de preocupación: China es uno. Y las inquietudes sobre la actividad económica van a ganar fuerza a medida que pasen las semanas, sin desconocer que la inflación seguirá arriba en la agenda”, dijo Pérez.
De esta manera, el analista explicó que la proyección de crecimiento para 2021 es del 9,7 %, con tendencia a acercarse al 10 %, mientras que para 2022 se espera un crecimiento del 4 %. Siendo el rezago del desempleo una de las variables de mayor peso para la economía colombiana.
Perspectivas de inflación
Ahora, en términos de inflación, entendiendo las complicaciones externas por precios de alimentos, se prevé un pico mundial de inflación de cara al primer semestre de 2022.
Agregó Pérez que la inflación de enero podría incluso crecer a ritmos del 1 %, siendo un panorama complejo al que se enfrenta Colombia en el corto plazo.
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Se prevé entonces que la inflación en Colombia termine en el 4,7 % en 2022. Hacia el futuro más cercano, se espera que los alimentos ayuden a empujar, a la baja, los precios en Colombia.
“También se estima que la variación de precios en arrendamientos y servicios en viviendas puedan entonces empujar al alza el comportamiento de la inflación”, advirtió Pérez.
Finalmente, las decisiones en tasas de interés demuestran que el contexto internacional refleja mayores alzas antes de lo esperado. “Colombia hizo lo propio y sorprendió. Esa sorpresa era importante porque la inflación tenía un comportamiento más alto a lo esperado”, agregó el analista.
Es por esto que se espera una tasa de interés que llegue pronto al 6 %: “para mayo y junio es probable que la inflación baje y se empiece a acercar al 5 %”.
