El país pasó de tener en 2011 un 30,43 % de adultos bancarizados a 60% de bancarización, según el Global Findex 2021 del Banco Mundial.
Colombia tiene aún más oportunidades para un uso mayor de los pagos digitales, dado que en América Latina, 150 millones de adultos bancarizados realizaron pagos a comercios minoristas solo en efectivo, incluidos más de 50 millones de adultos bancarizados en Brasil y 16 millones de adultos bancarizados en Colombia. Vea más en finanzas personales.
Así lo indica el más reciente informe de inclusión financiera del Banco Mundial, el Global Findex, que fue publicado por primera vez en 2011 y cuyos resultados se entregan cada tres años. La primera vez que se dieron a conocer datos sobre Colombia, en 2011, el país registraba el 30,43% de la población bancarizada, cifra que aumentó a 39% en 2014; a 45,76% en 2017 y que en 2021 llegó a 59,72%.
Uno de los puntos clave de inicio para avanzar en la bancarización no solo en Colombia, sino en todo el mundo, fue la pandemia del Covid-19, la cual llevó a los gobiernos de los países a entregar ayudas a la población con menores ingresos económicos. Fue así como a partir de las ayudas del gobierno los beneficiarios empezaron a recibir dinero a través de pagos digitales. Sin embargo, no fue así en todas las regiones.
Mientras en América Latina y el Caribe se observó un incremento de 18 puntos porcentuales en la tenencia de cuentas desde 2017, el mayor aumento de todas las regiones en desarrollo a nivel mundial, en África subsahariana el 33% de los adultos posee una cuenta de dinero móvil en la actualidad, donde la principal barrera para abrir un producto de esos es la falta de un documento de identidad.
“En África subsahariana, por ejemplo, la falta de un documento de identidad sigue siendo un importante obstáculo que atenta contra la tenencia de cuentas de dinero móvil para el 30 % de los adultos que no poseen cuentas, lo que sugiere una oportunidad para invertir en sistemas de identificación accesibles y confiables. Más de 80 millones de adultos que no poseen una cuenta siguen recibiendo pagos del Gobierno en efectivo; la digitalización de algunos de estos pagos podría permitir ahorrar dinero y reducir la corrupción. Aumentar la tenencia y el uso de cuentas requerirá de confiabilidad en los proveedores de servicios financieros, confianza en el uso de productos financieros, un diseño personalizado de productos y un marco de protección al consumidor sólido y de cumplimiento efectivo”, indica el reporte.
Inclusión financiera en el mundo sigue en aumento
La base de datos Global Findex, que realizó un sondeo sobre cómo personas de 123 economías usaron los servicios financieros durante 2021, es una iniciativa del Banco Mundial que se publica cada tres años en colaboración con Gallup, Inc.
La pandemia de Covid-19 ha estimulado la inclusión financiera, lo que generó un gran aumento en la adopción de pagos digitales en el contexto de una expansión a nivel mundial de los servicios financieros formales. Esta expansión, a su vez, creó nuevas oportunidades económicas, lo que contribuyó a reducir las disparidades de género en la tenencia de cuentas, además de generar resiliencia en los hogares para lograr una mejor gestión de las crisis financieras, de acuerdo con la base de datos Global Findex 2021.
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Al 2021, el 76 % de los adultos a nivel mundial contaban con una cuenta en un banco, otra institución financiera o por medio de un proveedor de dinero móvil, lo que marca un aumento en relación con el 68 % que se registraba en 2017 y al 51 % registrado in 2011. Cabe destacar que el aumento en la tenencia de cuentas se dio con una distribución equitativa en muchos más países. Si bien, en estudios anteriores de Findex durante la última década, gran parte del crecimiento se concentraba en India y China, el estudio de este año indica que el porcentaje de tenencia de cuentas aumentó en dos dígitos en 34 países a partir de 2017.
La pandemia también ha generado un mayor uso de los pagos digitales. En economías de ingreso bajo y mediano (sin incluir a China), más del 40 % de los adultos que realizaron pagos a comercios minoristas en tiendas o en línea con una tarjeta, un teléfono o Internet lo hicieron por primera vez desde el inicio de la pandemia.
Lo mismo ocurrió con más de una tercera parte de los adultos en todas las economías de ingreso bajo y mediano que pagaron una factura de servicios públicos directamente desde una cuenta formal. En India, más de 80 millones de adultos realizaron su primer pago digital a comercios minoristas tras el inicio de la pandemia, mientras que en China lo hicieron más de 100 millones de adultos.
Digitalización de pagos promueve la inclusión financiera
En la actualidad, dos terceras partes de los adultos de todo el mundo realizan o reciben pagos digitales, mientras que la proporción en las economías en desarrollo subió del 35 % en 2014 al 57 % en 2021.
En dichas economías, el 71 % de los adultos tienen una cuenta en un banco, en otra institución financiera o por medio de un proveedor de dinero móvil, lo cual representa un aumento con respecto al 63 % que se registraba en 2017 y al 42 % registrado en 2011. Las cuentas de dinero móvil generaron un gran aumento en la inclusión financiera en África subsahariana.
“La revolución digital ha catalizado aumentos en el acceso y el uso de los servicios financieros en todo el mundo, lo que ha significado una transformación en las formas en que las personas realizan y reciben pagos, concretan préstamos y ahorran”, señaló David Malpass, presidente del Grupo Banco Mundial. “La creación de un entorno normativo propicio, la promoción de la digitalización de los pagos y la mayor expansión del acceso a cuentas y servicios financieros formales para las mujeres y los sectores pobres son algunas de las prioridades normativas para mitigar los reveses sufridos en materia de desarrollo a causa de las múltiples crisis actualmente en curso”.