Las cookies de terceros van a desaparecer en 2022, según lo anunció Google desde comienzos de este año. Sin embargo, ese cambio en materia digital significa nuevos retos para las empresas que se mueven en el ecosistema digital.
“Esto significa que la conversación sobre la privacidad está avanzando. El impacto inminente de los cambios normativos y de la industria sobre la privacidad será un factor determinante para los profesionales del marketing”, afirmó Felipe Molina, director de cuentas de plataformas programáticas de Verizon Media Latinoamérica, en entrevista con Valora Analitik.
Molina apuntó que los actores que hayan creado un mapa de identidad utilizando una diversidad de datos propios, basados en el permiso, multicanal y de primera mano, estarán en condiciones de permitir a los profesionales del marketing confiar en soluciones nuevas y alternativas de identidad, orientación y medición en el nuevo mundo sin cookies.
Ante la pregunta de si se prevé un efecto adverso en el nivel de publicidad y los montos destinados a ese rubro de las empresas que pautan con base en datos, el vocero consideró que este asunto puede generar cambios en la economía porque una buena parte de las organizaciones utilizan ese sistema.
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“Editores, anunciantes y plataformas han de encontrar una solución que les permita avanzar sin perjudicar el ecosistema digital. De lo contrario, nos enfrentaremos a una crisis publicitaria y económica, en la cual los anunciantes observarán una caída del nivel de compromiso de los consumidores, un menor retorno de la inversión, menores perspectivas de crecimiento y más tensión”, sentenció Felipe Molina desde Verizon.
Molina concluye que la desaparición de las cookies está empezando a tener un impacto real sobre las marcas, los editores de contenido y todo el resto del sector, lo que reconfigura el ecosistema publicitario y la forma en que las firmas se relacionan con sus audiencias.
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