El ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, explicó que, si no se tramita la ley de financiamiento, el presupuesto de 2025 quedaría con un faltante de $12 billones que le implicaría a la cartera decretar una suspensión.
Recomendado: MinHacienda ya no ve posibilidad de bajar tasas de interés más agresivamente en diciembre
“El 2 de enero sabremos si ese presupuesto está financiado o no y cuál es el trámite para completar la financiación de 2025. Si no, tengo que hacer un decreto de suspensión en la parte que no esté financiada”, dijo este martes durante el XI Congreso de Asofiduciarias, en el que Valora Analitik es medio aliado.
Desde que se radicó en el Congreso de la República, el Gobierno explicó que la ley de financiamiento era necesaria para cubrir el presupuesto general de la Nación de 2025, pues con ella se espera incrementar el recaudo en $12 billones.
La semana pasada, el Congreso definió quiénes serán los ponentes del proyecto de ley, tanto para Cámara de Representantes como para Senado. Sin embargo, el debate aún no figura en las agendas, a pesar de que la iniciativa se radicó con mensaje de prioridad. Vale la pena recordar que la legislatura va hasta el 16 de diciembre.
De interés: MinHacienda quiere ir tras quienes pongan activos personales a nombre de sus empresas
Desde el Gobierno, por lo pronto, se está planeando una reunión con los congresistas ponentes que son los llamados a evaluar la conveniencia de la propuesta. Bonilla ya estuvo de forma no oficial en la comisión IV del Senado explicando qué propone la ley de financiamiento a mediados de octubre.
Mientras tanto, Bonilla es enfático en que el Gobierno insistirá en que la ley de financiamiento obtenga el aval del Congreso, incluso si no es aprobada este año. “Tiene que seguirse desarrollando para que podamos financiar el presupuesto”, contestó cuando se le preguntó por la posibilidad de que el proyecto de hunda.
Al respecto, el exministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas, cuestionó que la ley de financiamiento busca modificar la Regla Fiscal para darle al Gobierno más flexibilidad en medio de un deterioro de las finanzas públicas, que viene sucediendo desde 2018.
“El proyecto no se ha empezado a debatir, pero tiene un enorme veneno porque cambia la regla fiscal. Si no se aprueba esa ley al Gobierno le toca ajustar el presupuesto del otro año, apretarse el pantalón. A mí eso me daría tranquilidad”, señaló.
Presupuesto de Colombia para 2025
A finales de julio, el Gobierno puso a consideración del Congreso el Proyecto de Ley de Presupuesto General de la Nación (PGN) para la vigencia fiscal 2025, por un valor de $523 billones que se financiaría así: $495,7 billones con recursos de la Nación y $27,3 billones con ingresos propios de los establecimientos públicos nacionales.
Sin embargo, las comisiones económicas no lograron aprobar el proyecto de ley antes de que se vencieran los tiempos de la discusión, lo que implica que el Gobierno debe resolverlo vía decreto a finales de este año. Durante el debate en el legislativo se advirtió en varias ocasiones que el monto era muy alto.
Finalmente, Bonilla dio un parte de tranquilidad frente a la posibilidad de que el otro año se repita la situación de este 2024 por cuenta del bajo recaudo tributario y el descuadre que ha implicado en las cuentas del Gobierno. “La reducción del recaudo se debe a las devoluciones solicitadas por el impuesto de renta, pero en 2025 no hay devoluciones”, dijo.
