A pesar de tener menores ingresos en el futuro por la eliminación de algunos impuestos en la Ley de Financiamiento, Colombia todavía tiene metas de seguir reduciendo sus niveles de deuda pública como porcentaje del Producto Interno (PIB) en los próximos años.
Eso defiende la decisión de Moody´s de confirmar la calificación de Colombia en Baa2 y elevar la perspectiva de negativa a estable.
Así lo dijo en Bogotá el analista de la firma, Renzo Merino.
El experto advirtió que, aunque la previsión se mantiene en 3,3 % para el crecimiento económico colombiano en 2019, “hay más riesgos a la baja” que al alza.
Esos riesgos podrían llevar el PIB nacional a niveles de 3% este año.
Los riesgos, dijo, son del sector externo principalmente, mientras que por el lado interno se está a la expectativa del repunte de la inversión y de demanda interna.