El Puerto de Urabá entraría a operar en octubre de 2019, dijo el gobernador de Antioquia, Luis Pérez durante su rendición de cuentas.
La inversión estimada en este proyecto es de US$133 millones.
«Contra la voluntad del Gobierno de Antioquia, el proyecto se viene retardando por parte de los socios privados. El puerto está con diseño definitivo y de detalle y adjudicado a un constructor. No obstante, hay dificultades que lo tienen casi parado», comentó.
Entre los obstáculos, se refirió a la falta acuerdo entre los empresarios bananeros y los promotores del proyecto en precios de embarque y cierre financiero del proyecto.
Afirmó que el ruido de la Financiera de Desarrollo Nacional (FDN) con el tema reputacional de los empresarios bananeros causó la desvinculación del proyecto de la Agencia Francesa de Desarrollo y de su brazo financiero.
El contrato de la concesión entre la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI) y Puerto Antioquia ha sido demorado por dicha agencia, según el funcionario.
También mencionó la demora ocasionada por la restitución de tierras de una comunidad afro en Puerto Girón.
La diferencia entre los socios privados no ha permitido llevar la solicitud de crédito a los bancos prestamistas, que son el banco alemán KFW, la institución financiera de desarrollo del Estados Unidos (Opic), Davivienda y la Financiera de Desarrollo Nacional (FDN).
«El presidente Iván Duque y el gobernador han dado un apoyo altísimo. Pero los empresarios parecen no tener prisa. La paz y la gran transformación de Urabá dependen de los puertos. Los empresarios bananeros no se dan cuenta que demorar el puerto es como envenenar la comida», finalizó.