El presidente Gustavo Petro abordó la propuesta de una Asamblea Constituyente en Colombia y respondió a la pregunta sobre si la convocaría mediante un decreto o en un estado de conmoción interior, como han sugerido algunos sectores políticos.
Durante una entrevista con Noticias RCN, el mandatario destacó que: «La Constitución establece las vías del poder Constituyente. El poder constituyente no se convoca, es el pueblo el que se convoca él mismo para decidir sobre aspectos fundamentales del país. Ese es el poder constituyente».
Y añadió: «Yo pienso que el poder Constituyente ya arrancó porque tenemos una población que cada vez más decide, un pueblo no que protesta, sino que decide, y eso debe terminar en un instrumento de aplicación constitucional como tal, como la Constitución del 91», añadió.
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«Más el contenido y menos la forma»: Petro sobre Asamblea Constituyente
El presidente sostuvo durante la entrevista que las formas legales y constitucionales son importantes. «Son muy importantes, pero sin contenido no hay forma. Entonces, ¿cuál es el contenido? La decisión de un pueblo. Que un pueblo sepa que hemos llegado a un punto de un nudo gordiano y que es necesaria su intervención para que el país cambie».
El presidente ha delineado los puntos que considera prioritarios en la eventual Constituyente, están temas como pensiones, salud, acceso a la tierra para el campesinado, así como los persistentes problemas en el sistema judicial.
Además, señaló las deficiencias en el ordenamiento territorial, ejemplificando con la dificultad de acceso en lugares como el sur del departamento de Bolívar.
El presidente Petro también respondió a las críticas del presidente del Congreso, Iván Name, destacando que el Congreso ha tenido diferentes roles a lo largo de la historia, incluyendo momentos en los que estuvo influenciado por el paramilitarismo, situación que él mismo denunció.
Expresó su deseo de un Congreso que verdaderamente represente la voluntad mayoritaria del pueblo, haciendo hincapié en la necesidad de observar los resultados en la práctica más allá de los discursos.
“Yo quiero un Congreso que le obedezca la mayoría del pueblo. Eso hay que verlo en los hechos, eso no es de discurso. Ni tú ni yo vamos a resolverlo. Esperemos a ver qué decidimos», añadió.
Posteriormente, el presidente, al destacar las razones que, desde su perspectiva, respaldan la necesidad de un proyecto Constituyente, subrayó que la verdadera solución a las deficiencias en el desarrollo de la Constitución del 91 no puede encontrarse sin recurrir a una asamblea.
«Es el Congreso quien debe resolver esto», afirmó. «Debemos esperar para ver cuál será su decisión». Concluyó reiterando su deseo de contar con un Congreso que responda a la voluntad mayoritaria de la población.
El mandatario agregó en su cuenta de Twitter: “¿Es más importante el contenido que la forma? Sin contenido, no hay forma, pero las formas existen, evolucionan y actúan sobre el contenido”.
Y agregó: “En el caso en concreto, el contenido es: si la gente de Colombia, las y los colombianos, deciden sobre el país, sus problemas y su destino”.
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La propuesta de una Constituyente: análisis
Las críticas hacia el presidente han sido contundentes. El representante a la Cámara por Bogotá del Centro Democrático, Andrés Forero, acusa al presidente de no cumplir sus promesas de campaña y de emular los métodos de Chávez.
Afirma: “Pretende llevar al país a una constituyente que redacte un texto a la medida de sus caprichos. Y para rematar quiere hacerlo por mecanismos extra constitucionales”.
El analista político, Carlos Andrés Arias, señala que, aunque el presidente evita mencionar explícitamente la convocatoria de una Asamblea Constituyente, en la práctica, el proceso propuesto sería similar.
Además, se resalta la preocupación sobre el uso de discursos emotivos y la exacerbación de divisiones sociales para promover esta iniciativa, así como la importancia de que las instituciones democráticas estén alerta ante este tipo de movimientos.
“Lo que plantea es que el pueblo colombiano se organice y reclame un proceso Constituyente para reformar algunas normas y reglamentos que están en la Constitución”, señala Arias.
Finalmente, se sugiere que esta estrategia podría ser utilizada por el presidente para mantenerse en el poder o asegurar un legado político.
“Petro sabe que su gestión es deficiente, que su gestión es débil y sabe que no va a lograr desarrollar una gestión eficiente, la única forma de quedarse con el poder político es esta”, puntualiza el experto.
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