Pese a las dificultades del sector en 2023, la constructora Coninsa resaltó sus resultados financieros y de negocio el año pasado. Y para 2024, aunque hay retos que persisten, la empresa espera consolidar su presencia en Colombia.
Así lo dijo Alejandra Zapata, presidenta de Coninsa, en respuesta a un cuestionario enviado por Valora Analitik para conocer a profundidad el estado del negocio.
Zapata indicó que, al cierre de 2023, Coninsa reportó un Ebitda de $36.771 millones (18 % más que en 2022) y una utilidad neta de $36.410 millones (aumeto del 16 %). Los resultados, dijo, se impulsaron en el desempeño de la Unidad de Desarrollo Inmobiliario, gracias a hechos como el acuerdo de inversión con el fondo Nexus Capital para la construcción de un proyecto en Bogotá.
“Este tipo de alianzas con los grandes fondos inmobiliarios, nos permite fortalecernos con capital de trabajo, generando oportunidades de vivienda e inversión que son diferenciables, rentables y que permiten aumentar la disponibilidad de soluciones habitacionales”, respondió la ejecutiva.
Durante el año pasado, la constructora se enfrentó a tres retos claves, de acuerdo con Zapata y en línea con lo dicho previamente por líderes gremiales y empresas del sector. El primero, la baja ejecución de grandes proyectos. Segundo, el incremento de las tasas de interés que afectó la financiación de los proyectos, así como la de los clientes. Y tercero, el desistimiento en las ventas por la caída del poder adquisitivo de las personas.
Para enfrentarlos, Coninsa buscó tener “deliberadamente unos niveles de deuda muy bajos y excelente liquidez, pudiendo así aprovechar diversas oportunidades en el mercado y las capacidades únicas como nuestra integración vertical”.
Así será 2024 para Coninsa
Alejandra Zapata señaló que, en 2024, los desafíos para Coninsa serán “muy similares a los de 2023 con una leve disminución”. Y resaltó que habrá un aumento en el inventario terminado. Así, se podrá continuar en el fortalecimiento de “nuestras unidades estratégicas de negocio y aprovecharemos nuestra capacidad operativa e infraestructura”.
Adicionalmente, y citando el ejemplo del acuerdo con Nexus Capital, la presidenta de Coninsa resaltó que en 2024 buscarán alianzas con grandes fondos inmobiliarios. De hecho, adelantó que “ya tenemos conversaciones avanzadas para el desarrollo de un importante proyecto de vivienda en la ciudad de Medellín”.
Y agregó: “Para los años siguientes, es una decisión estratégica de la compañía el seguir teniendo alianzas con fondos de inversión, family office y diversos inversionistas, con el fin de apalancar el crecimiento y así poder como ecosistema, aumentar la oferta de soluciones de hábitat”.
Sobre las construcciones de viviendas, Coninsa en 2024 plantea un portafolio con una distribución de:
- 70 % en el rango VIP (Viviendas de Interés Prioritario), VIS (Viviendas De Interés Social) y VIS Renovación
- 26 % en No VIS hasta 500 salarios mínimos mensuales
- 3 % en No VIS mayor a 500 SMMLV. Esta última enfocada en el departamento de Antioquia
Los proyectos y obras se concentrarán en Cundinamarca, Antioquia y el Caribe. Allí se están comercializando más de 45 proyectos entre vivienda, comercio, industria, institucional y servicios. Además, hay 10 obras en proceso de construcción en los sectores de hotelería, comercio, educación, servicios e infraestructura.
De esta forma, Coninsa para 2024 proyecta crecimiento de doble dígito tanto en ingresos como en utilidades. El propósito es tener “las mayores ganancias de la compañía en los últimos años”.
El proceso de reorganización e Hidroituango
Alejandra Zapata también respondió preguntas respecto al proceso de reorganización de 2021 de Coninsav y su participación en Hidroituango, hechos relacionados entre sí.
Sobre el segundo recordó que “las finanzas de la organización no estuvieron afectadas, porque las razones que nos llevaron a acudir a este mecanismo fue una inminente incapacidad de pago por el proceso de responsabilidad fiscal derivado de la contingencia de Hidroituango”.
En este proceso se condenó a pagar a los investigados más de $4 billones. Sin embargo, la reorganización no se materializó por el pago de las aseguradoras.
El Consorcio CCC Ituango ejecutó obras hasta el final del contrato en noviembre de 2022, que fueron recibidas a satisfacción y ahora se avanza en el proceso de liquidación.
Y ahora que terminó esta etapa para la empresa, Zapata dijo que si se da la posibilidad de una nueva participación de Coninsa en un proyecto similar “efectivamente lo haríamos. Es para lo que hemos desarrollado nuestra experticia y capacidades”.