El precio del oro registró nuevos máximos históricos este lunes, 1 de abril. Esto impulsado por el descenso de la inflación de Estados Unidos, reforzando las apuestas de que la Fed recortará los tipos de interés por primera vez en junio.
En materia de precios, el oro al contado sube un 1,1 %, hasta US$2.258 por onza, tras registrar máximos históricos en US$2.265 al comienzo de la jornada. Los futuros del oro suben un 1,8 % hasta US$2.279.
Con estos datos, el oro registró en marzo su mayor subida mensual en más de tres años, tras un vertiginoso repunte impulsado por las apuestas a favor de un recorte de tipos, la fuerte demanda de activos refugio y las compras de los bancos centrales.
Con base en esos datos, Valora Analitilk consultó a Alejandro Useche, profesor de la Escuela de Administración de la Universidad del Rosario y a Luis Mondragón, experto en Mercados Capitales, con el fin de explicar por qué el oro es el activo más importante para la economía mundial y cómo se mide su precio en el mercado.
Los inicios del oro en la economía
El oro es un metal precioso que desde tiempos muy antiguos ha sido relacionado con el poder y la riqueza.
“Luego de épocas en que diferentes culturas funcionaban con base en el trueque para desarrollar sus actividades económicas, se buscaron bienes físicos que tuvieran una característica especial y que sirvieran como medio de cambio. En algunas sociedades, funcionaban bienes como la sal y en otras hojas de tabaco, por poner un ejemplo; pero sus características físicas no les permitían conservar más su poder de compra a través del tiempo”, cuenta Alejandro Useche.
Y agrega: “Esto hizo que los metales, particularmente metales preciosos como el oro y la plata, fueran muy apetecidos porque físicamente aguantan las condiciones del clima se pueden almacenar, además son escasos, atractivos y fácilmente trabajables, de manera que el oro y la plata no solamente eran una representación de poder o riqueza, sino que sirvieron durante mucho tiempo para muchas sociedades como dinero”.
Por su parte, Luis Mondragón, indica que “el oro siempre ha sido una gran reserva de valor y con el tiempo fue quedando como el respaldo de los billetes porque es más fácil para las personas andar con billetes en vez de andar con oro que sonaba que era pesado y cosas de ese estilo, pero el billete tenía sentido en la medida en que estuvieron respaldado por un metal precioso, en este caso, el oro”.
En ese contexto, es importante recordar que el dinero cumple tres funciones en una sociedad: que sea unidad de cuenta, es decir, que podamos medir los precios en función de esa unidad; segundo, también es un medio de cambio, es decir, que sea una mercancía, un producto o un bien que se acepte como pago al realizar transacciones; y tercero, depósito de valor, esto implica que debe conservar su poder de compra a través del tiempo.
En su concepto, Useche explica que muchos otros productos no cumplían con alguna de estas características, por ejemplo, la sal o las hojas de tabaco, las cuales fueron utilizadas también como dinero en algún momento por determinadas sociedades y culturas, pero ellas no servían bien como depósito de valor y fueron reemplazadas.
En cambio, los metales sí conservan sus características físicas a través del tiempo, “eso hizo que el oro y la plata empezaran a ser muy atractivos para representar algo que es valioso, que es escaso, que además es atractivo, fácilmente maleable para que fuera dinero, entendido como unidad de cuenta, medio de pago y depósito de valor”, explica Useche.
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Contando la historia de cómo se implementó el oro como modelo de cambio, Useche explica que “hasta finales del siglo XIX se llevó a cabo un tratado internacional que permitió establecer de manera homogénea alrededor del mundo los tipos de cambio entre las diferentes divisas, y ese acuerdo se llamó el patrón oro”.
Ahí se definió cuánto iba a costar el oro en función de cada divisa y, por lo tanto, cuál era a su vez el patrón y el precio de cada divisa entre una y otra a tasas de cambio fijas.
“Ese patrón oro implicaba también que sólo era permitido emitir dinero si se contaba con reservas físicas de oro que lo respaldara. Sin embargo, problemas como la Primera Guerra Mundial llevaron a que este patrón se incumpliera, llevando a que los países emitieran billetes por encima de sus reservas de oro y hubo que hacer unas modificaciones, pero no iban a durar mucho”, indica Alejandro Useche.
Por eso, explica Useche, en el año de 1944, ya terminando la segunda guerra mundial, los aliados occidentales se reunieron en la llamada conferencia de Bretton Woods, donde se definió un nuevo sistema monetario internacional que iba a tener, como hasta el día de hoy, al dólar como la moneda de mayor aceptación alrededor del mundo y se decidió en ese momento que el dólar iba a seguir atado al oro, es decir, que Estados Unidos debía tener reservas de oro para poder emitir dólares.
Con ello, todos los demás países del mundo tendrían una tasa de cambio fija frente al dólar, pero sin la necesidad de contar con reservas de oro que respaldaran la emisión.
No obstante, Useche cuenta que esto cayó en el año 1971, bajo la presidencia de Richard Nixon, ya que no se estaba cumpliendo y, al día de hoy, ninguna moneda del mundo está, como en esa época, respaldada directamente por oro para poder ser emitida.
¿Por qué el oro sigue siendo importante para la economía?
Entonces, explica Useche que “el oro sigue siendo en la actualidad un activo muy importante para las economías del mundo. No tanto por su valor de uso, es decir, por los usos que directamente se le pueden dar a él físicamente, sino porque sigue representando poder, riqueza y se convierte en algo que en economía se llama un activo refugio”.
Esto porque es un activo que da alta volatilidad en los mercados y permite a los inversionistas protegerse precisamente de esos altibajos, de esas volatilidades, de esos riesgos en relación con lo que pasaría con otros activos como una divisa o como las acciones en la bolsa.
De igual manera, “los medios electrónicos ganaron popularidad, por lo que todo se hace vía virtual a través de los diferentes monederos o billeteras virtuales de los bancos en términos de transferencias electrónicas, entonces el oro realmente fue quedando relegado en la última década y, al mismo tiempo, con las crisis financieras como la del 2008 fue perdiendo algo de validez en el sentido de que las monedas virtuales como el bitcoin, por ejemplo, fueron ganando popularidad”, explica Mondragón.
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¿Cómo se mide el precio del oro en el mercado?
El oro tiene un mercado internacional muy grande y los precios son muy altos. “Los precios son definidos precisamente a nivel mundial por mecanismos de mercado que, como otros productos, bienes o servicios, están sujetos a la oferta y la demanda”, explica Useche.
En la actualidad, la demanda principalmente de oro, alrededor del 50-51% de la demanda mundial, corresponde a empresas de joyas que solicitan el oro para realizar sus productos. Pero también el oro es demandado para usarse en productos tecnológicos, dada su condición física, por ejemplo, para ser un excelente transmisor del sonido de alta calidad o de piezas de gran precisión y también es demandado como un activo financiero.
Existen incluso mercados especializados en los que se transan metales preciosos, bienes naturales. Muchos de estos sitios son llamados bolsas mercantiles.
“En estas bolsas mercantiles alrededor del mundo se compran y venden productos no solamente agrícolas o agropecuarios, sino también metales preciosos como el oro y la plata. Recientemente el oro ha tenido un comportamiento, cuando miramos la tendencia de largo plazo, al alza”, señala Alejandro Useche.
Además, Useche agrega que “la pandemia hizo que se presentara una mayor demanda de oro como activo refugio para cubrir el riesgo que los inversionistas tienen en sus portafolios cuando ponen su dinero en otras alternativas, como lo son las divisas, las acciones u otros títulos valores”.
Por su parte, el precio del oro en la actualidad, por un entorno internacional complejo y altas volatilidades, se encuentra al alza, llegando aproximadamente en estos últimos días a US$2.258 por onza de oro.
“El oro en este momento ha venido teniendo ese comportamiento que está asociado en parte a las bajas de tasas interés, que ya el mercado está anticipándose a ellos y, desde el punto de vista técnico, viene podrá seguir subiendo el precio, pues como el oro se negocia en los mercados de punto de vista financiero, algunos podrán pensar desde un punto de vista especulativo”, concluye Luis Mondragón.
Con estos datos y teniendo en cuenta la voz de los expertos, es importante tener en cuenta que esto es definido por la oferta y la demanda en los mercados internacionales y, a pesar de que gran parte de la demanda se debe a la necesidad del mercado de joyas, en la mayoría el precio depende de la oferta y la demanda que se hace del oro como una inversión o como un activo refugio.