Este viernes, 29 de marzo, se conoció el informe de inflación en Estados Unidos para el mes de febrero, en el cual el índice de precios de gastos de consumo personal (PCE) aumentó un 2,8 % anual.
Para abril la FED podrá comenzar a considerar recortes de las tasas de interés, según la medida que el banco central considera como la más importante.
El índice de precios de gastos de consumo personal, excluyendo alimentos y energía, aumentó un 2,8 % en un período de 12 meses y un 0,3 % más que en enero, informó el Departamento de Comercio. Ambas cifras coincidieron con las estimaciones del Dow Jones.
Incluyendo los costos volátiles de alimentos y la energía, la lectura general del índice de precios de gastos de consumo personal (PCE) mostró un aumento del 0,3 % para el mes y del 2,5 % a tasa de 12 meses.
Tanto las acciones como el mercado de bonos están cerrados con motivo del festivo del Viernes Santo.
Si bien la Reserva Federal analiza ambas medidas al formular políticas, considera que la inflación básica es una mejor medida de las presiones inflacionarias a largo plazo.
La Reserva Federal apunta a una inflación anual del 2 %; el PCE subyacente no ha estado por debajo de ese nivel en tres años.
Destacado: La inflación en Estados Unidos en febrero fue de 0,4 % y de 3,2 % anual
“Nada realmente sorprendente. Obviamente no son las cifras que la Reserva Federal quiere ver, pero no creo que esto vaya a tomar a nadie con la guardia baja cuando regresen a trabajar el lunes”, declaró a CNBC Victoria Greene, directora de inversiones de G Squared Private Wealth.
“Creo que todo el mundo va a girar hacia el sector laboral con bastante rapidez y decir: bueno, tal vez si vemos algo de debilidad y grietas aquí, esta pequeña rigidez en la inflación y el PCE no va a importar tanto”, agregó.
El aumento de los costos de la energía ayudó a impulsar la lectura principal, con un aumento del 2,3 %.
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