En 2023, el recaudo de impuestos a los combustibles en Colombia aumentó 14 %, pasando de $7,4 billones en 2022 a cerca de $8,5 billones, el año anterior.
Así lo reveló el más reciente informe de la Asociación Colombiana de Petróleo y Gas (ACP), “Combustibles líquidos en Colombia: evolución 2023 y perspectivas 2024-2033”.
Al desglosar el total de los aportes, se evidenció que $4,7 billones llegaron al Gobierno por gravámenes (IVA, impuesto nacional e impuesto al carbono); y $3,8 billones a departamentos y municipios por sobretasa.
“Este incremento estuvo asociado, principalmente, al aumento normativo de las tarifas del impuesto nacional y la sobretasa, según la inflación; y en el caso de la gasolina al aumento significativo del ingreso al productor, base gravable del IVA”, escribió la ACP
Para este 2024, la agremiación estima que solo por concepto de impuestos se pueda llegar a tener un recaudo de $9 billones que iría a las arcas del Gobierno, departamentos y municipios.
Las proyecciones en el consumo de combustibles en Colombia
La estimación de la ACP de que el recaudo del sector este en los $9 billones, están sustentadas en la expectativa de variaciones moderadas en el precio de la gasolina y un crecimiento de la demanda cercano al 2 % en este 2024.
Para el gremio, en la próxima década se calcula que la demanda del sector de combustibles líquidos crecerá 1,8 %, combinando gasolina, diésel y jet.
“Si vemos los datos específicos de cuál va a ser el aumento por combustible, vemos que la gasolina va a tener un aumento aproximado de 1,5 %, el diésel 1,7 % y el jet 3 %. Los tres tipos de combustible, entonces, tienen una tendencia al alza marcada de aquí a 2033”, describió Andrés Bitar, vicepresidente de Estrategia y Asuntos Regulatorios de la ACP.
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Y agregó que “los combustibles líquidos están aquí para quedarse y son absolutamente necesarios para garantizar la seguridad energética del país que representa más del 43 % del consumo final de energía”.
Aunque la ACP hace un estudio de perspectiva, advierte que hay ciertos impulsadores o relantizadores que podrían impactar ese ritmo proyectado.
En primera instancia se habla del crecimiento económico. “Si en la próxima década Colombia experimenta un crecimiento superior a lo esperado, lo que nosotros esperamos es que el incremento en la participación en la demanda de cada uno de los combustibles debería aumentar más del 1,8 %”.
Otro de los factores que va a incidir en el país, es qué tan rápido se va a ampliar la infraestructura aeroportuaria y, tercero, algo que ha mencionado el Gobierno como una de sus prioridades en el Plan Nacional de Desarrollo, el impulso al turismo.
De otro lado, en la caída de las estimaciones podrían incidir una mayor eficiencia de los vehículos híbridos y qué tan rápido se da su ingreso al mercado colombiano, pues de hecho “un reciente informe reveló que la meta de entrada de vehículos híbridos para 2030 a Colombia no se iba a cumplir”; y los mayores bloqueos en las vías que dificulten el transporte de los combustibles.
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