La Empresa de Metro de Bogotá solicitó al consorcio chino encargado de la primera línea adoptar de manera inmediata las medidas necesarias que permitan cumplir con las obligaciones del contrato que promete estar terminado en marzo del 2028.
En una carta, el gerente de la Empresa Metro de Bogotá, Leonidas Narváez, expone sus preocupaciones respecto a las “desviaciones” de lo programado e “ineficiencias” en la gestión del concesionario que pueden traer como consecuencia una situación de riesgo en la obtención de los resultados del proyecto.
“Hay dificultades estructurales en la empresa que requieren que sean modificados para mantener el buen ritmo. Este es el contrato del sueño de los colombianos, es la obra de infraestructura más importante de Colombia y de América Latina. Mal haríamos con el conocimiento que tenemos de no hacer un llamado contundente para que el contrato vuelva a las condiciones de ejecución con que venía”, sustenta el gerente.
Los puntos señalados por la Empresa Metro de Bogotá
Cabe señalar que el 26 de enero se venció el plazo de cura otorgado al concesionario para la entrega de 29 planes de acción, que debía elaborar y presentar para la recuperación de los atrasos en las “Unidades de Ejecución” cuya relación ejecutado/programado es inferior al 85 % de cumplimiento.
Una de las solicitudes que exige Narváez es: “un cambio drástico en la dirección del proyecto, con un gerente general que tenga experiencia en proyectos metro−ferroviarios, dominio completo del idioma español,
capacidad y atribuciones para la toma de decisiones, tener liderazgo y mando al interior de la estructura organizacional, en busca de cumplir con los objetivos del proyecto”.
El gerente de la Empresa del Metro de Bogotá critica en la carta que, “la actual línea de mando de ML1 no ha conducido el proyecto por la senda correcta, no ha tomado las medidas y acciones correctivas que permitan cumplir los hitos establecidos en el contrato”.
¿Consorcio incumple contrato de primera línea del metro de Bogotá?
El gerente señala que el desarrollo del contrato de concesión requiere que ML1, como parte contratante, ejecute los diseños, permisos y la intervención de las redes dentro de plazos que posibiliten el avance oportuno de los frentes de trabajo para las obras civiles del viaducto y estaciones. Hasta el momento, no se cuentan con los diseños no objetados, ni se han obtenido los permisos y el traslado de redes necesarios que garanticen la continuidad de la secuencia constructiva del viaducto y las estaciones.
“La carta está basada en los análisis y la tendencia que hacemos del comportamiento viene desde julio y agosto del año pasado -2023-descendiendo, se coloca por debajo del programado temprano y tiene riesgo de estar por debajo del programado tardío en febrero o marzo”, dijo Narváez.
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Los atrasos de la primera línea del metro de Bogotá
En cuanto a la obra civil del viaducto, la actividad de cimentaciones se ve afectada por el retraso en el traslado de redes a cargo del concesionario, la falta de obtención de permisos y planes de manejo de tránsito, especialmente en la Avenida Caracas, y la escasez de mano de obra, lo que resulta en un incumplimiento del Plan de Ejecución V11.
“Al 15 de enero de 2024 el avance real acumulado de la obra civil es inferior al programado, lo cual aumenta el riesgo de atrasos e imposibilidad de cumplir la entrega oportuna de la misma y de los “hitos” establecidos para los sistemas metro− ferroviarios”, dice en la carta.
En cuanto al intercambiador de la Calle 72 con Avenida Caracas, a pesar de una reprogramación en 2022, el avance real al 15 de enero de 2024 es inferior al programado, lo que implica un incumplimiento del «hito» contractual para el 8 de octubre de 2024, afectando negativamente a la comunidad.
El avance real del 49,6 % al 15 de enero de 2024 es inferior al 75,0% programado.
El gerente ordenó que en la Calle 72 se debe trabajar 24 horas y terminar en la fecha pactada, “ya les pusimos una multa por no haber cumplido los diseños de $3.000 millones y si no cumplen se volverán a multar”, mencionó Narváez.
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Otro aspecto deficiente en la gestión de ML1, según la Empresa del Metro de Bogotá, son los temas sociales y de relaciones con la comunidad a lo largo del proyecto, “que no son oportunamente atendidos, y con la falta de sensibilidad necesaria para mitigar los riesgos de conflicto”.
“Trabajamos para generar un beneficio para la ciudad, sin embargo, el equipo en campo de ML1 no desarrolla sus actividades valorando el entorno y la comunidad beneficiaria del proyecto”, se agrega en la comitiva.
De acuerdo con lo anterior, el gerente de la Empresa Metro de Bogotá le solicita al concesionario adoptar de manera inmediata las medidas necesarias que le permitan cumplir con las obligaciones del contrato.
“Para lo cual manifestamos nuestra disposición para conocer presencialmente las acciones de contingencia y mitigación que le aseguren a Bogotá contar con la Primera Línea del metro, tan largamente anhelada por la ciudadanía en marzo de 2028”, concluye el documento firmado por Leonidas Narváez.
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