Para Álvaro Ríos, socio director de Gas Energy Latin America -firma consultora de gas natural, petróleo y energía-, Colombia no debe prescindir del gas natural de Venezuela. E, incluso, considera que PDVSA no debería encargarse de la operación del gasoducto.
Valora Analitik consultó con el directivo de la firma consultora de gas natural, petróleo y energía, quien también fue ministro de Hidrocarburos de Bolivia entre 2003 y 2004, en el marco de Foro Regulatorio Internacional que se realizó en Medellín este jueves y viernes.
La consideración la hizo en el marco del reciente anuncio de Ecopetrol de que se evalúa la posibilidad que, a partir de diciembre de 2024, se importe gas natural desde Venezuela a través del gasoducto binacional Antonio Ricaurte.
Además, Ríos defendió que en el continente antes de pensar en energías renovables, se debe impulsar el uso del gas natural. También, que los países deben fortalecer los organismos reguladores.
“En nuestra región tenemos la energía eléctrica menos contaminante, con agua y con gas natural”, dijo Ríos. Y agregó que, en el caso de Colombia, “no debe dejar de apostar por el petróleo y por el gas natural, que es la transición energética”. Según los cálculos de la consultora, si se produce la suficiente cantidad de gas, “desplazaríamos 22 % del carbón de la energía mundial”.
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Por qué defienden importar gas natural desde Venezuela
De acuerdo con Ríos, el gas natural venezolano ofrece múltiples beneficios para Colombia. “Es un gas que está cerca, entonces puede reflejar precios regionales”. Sin embargo, hizo una advertencia: “PDVSA está desmantelada y no tiene la capacidad técnica para recomponer el gasoducto y recuperarlo”.
Así, aseguró que “si Colombia hará algo debe buscarlo en el sistema, pero la operación debe estar en Ecopetrol y privados y no de PDVSA porque ha desmantelado su infraestructura y sus equipos técnicos”.
Hay que decir, sin embargo, que la opinión respecto a esto tiene matices. Por ejemplo, Luz Stella Murgas, presidenta de Naturgas, también en el Foro Regulatorio, asegura que, aunque no se deben descartar fuentes externas, Colombia debe apostar por la autosuficiencia.
“Nosotros tenemos que ser autosuficientes. Hay que habilitar las posibilidades externas (como la importación), pero no podemos depender de ellas”, dijo. Y agregó que Colombia no solo tiene potencial para “garantizar autosuficiencia por décadas”, sino también “hasta convertirnos en exportadores”.
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Proteger las instituciones
Ríos dijo que el tema del suministro de gas natural debe ir más allá de los discursos políticos. Por tanto, Colombia debe proteger a las instituciones. Particularmente, a la Comisión de Regulación de Energía y Gas (CREG).
“Mi mensaje para Colombia es no destruir sus órganos reguladores, sino fortalecerlos. Sectores políticos quieren desmantelar las instituciones para bajar los precios. Pero se van y dejan desabastecidos al país. Ojalá Colombia no siga el mismo camino, sino que fortalezca a la CREG”.
Como ejemplo de ello pone a Perú, que ha atravesado un periodo de inestabilidad con seis presidentes en cuatro años. Aun así, defiende que instituciones como el Banco Central, y los reguladores de energía, gas y transporte han mantenido las mismas directivas.
“Hay que blindar a estas instituciones y pedirle al presidente que se nombren mediante mecanismos estatales a los expertos comisionados de la CREG”, concluyó Ríos.
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