Un derrumbe en el kilómetro 42 de la vía que conecta Bogotá con Girardot, conocida como la ‘Nariz del Diablo’, ha causado graves trastornos a los viajeros desde la mañana del sábado 4 de noviembre. Este incidente ha llevado al cierre total de la carretera en ese tramo.
La Agencia Nacional de Infraestructura (ANI) ha comunicado que el derrumbe es consecuencia de las intensas lluvias que azotan la región. Como respuesta, se ha activado un sistema reversible a través del túnel Guillermo León, con el objetivo de garantizar la movilidad en la dirección Bogotá – Girardot.
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Así se está manejando la movilidad en la ‘Nariz del Diablo’
Hernán Alarcón, director de operaciones de la concesión encargada, Vía 40 Express, ha explicado que se ha implementado un sistema de tráfico reversible desde el kilómetro 48, en la zona conocida como Alto de Canecas, hasta Boquerón, con el propósito de facilitar el desplazamiento de los viajeros en dirección a Girardot.
El derrumbe, que involucró la caída de 300 metros cúbicos de material, ha requerido la intervención de maquinaria pesada para realizar labores de limpieza.
Las autoridades esperan que en las próximas horas se pueda lograr la reapertura de la zona afectada, restableciendo así el tráfico en este vital corredor vial y teniendo en cuenta la seguridad para los pasajeros.
