El ministro del Interior, Luis Fernando Velasco, ha estado en el centro del ojo público debido al conflicto que ha surgido entre él y los gobernadores de Colombia, quienes están organizados bajo la Federación Nacional de Departamentos (FND).
Los líderes regionales han pedido la renuncia del ministro Velasco, después de que afirmara que existe un componente electoral en la preocupación de los gobernadores hacia la seguridad en Colombia.
“Dejemos de ser hipócritas. En este país, quienes estamos en lo público tenemos nuestro corazoncito y cada uno irá para un lado. Le pido a los gobernadores que el tema de la seguridad no sea electoral, sino mucho más pausado”, dijo Velasco.
Comentario que no le cayó nada bien a los gobernadores. La FND, horas después publicó un comunicado donde expresó su descontento con el ministro, alegando que este parece no estar al tanto de las situaciones concretas en los territorios, que tergiversa las necesidades expresadas por las regiones y que no está cumpliendo un papel efectivo como facilitador.
En consecuencia, la FND solicitó abiertamente la dimisión de Velasco. Al respecto, agregaron que es “hipócrita considerar la inseguridad, el terrorismo y la violencia asuntos que deben atenderse de manera pausada. Cada segundo de su pausa es un nuevo asesinato, extorsión y agresión”.
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Ministro del Interior reconstruye su discurso
Tras la divulgación de la carta, el ministro se ha esforzado en reestructurar su discurso, enfatizando que el asunto de la seguridad debe ser un factor de unión nacional para hacer frente a la violencia.
Además, subraya la importancia de abordar la situación en su totalidad, evitando decir que el Gobierno limita la capacidad de acción de las fuerzas de seguridad.
“Vale la pena dar claridad que el debate sobre seguridad es de fondo y en el marco del mismo. Pido que en lugar de usar este elemento electoralmente, se use para unir a todos y enfrentar la inseguridad que padecen los ciudadanos en distintas regiones del país”, aseveró jefe de cartera.
Velasco aseguró que espera tener un diálogo honesto con los líderes de los departamentos, “esto no es un tema de egos, es un tema de entender que juntos debemos enfrentar las amenazas y hacer las tareas”, dijo a W Radio.
El analista político, Carlos Andrés Arias, señala que, “este suceso deja ver una fisura que no solamente está en el Congreso para rearmar la coalición, sino que ahora, se amplía a los gobernadores que han venido reclamando seguridad y justicia por parte del Gobierno Nacional”.
Poca negociación para rearmar la coalición
Uno de los deberes del ministro del Interior es coordinar las relaciones entre la Rama Ejecutiva y la Rama Legislativa, para el desarrollo de la agenda legislativa del Gobierno Nacional.
Sin embargo, esta no ha avanzado como se espera, al contrario, las grandes reformas no han tenido buena acogida en el Congreso y ha generado rupturas importantes dentro de la coalición de Gobierno.
¿En la cuerda floja?
Ricardo Ávila, analista senior de El Tiempo, apunta que la administración de Velasco ha demostrado carencias notables en cuanto al progreso de la agenda legislativa, las interacciones con la oposición y, en este momento, en la manera en que maneja sus diferencias con los gobernadores.
“El Gobierno de Gustavo Petro es disfuncional y el MinInterior lo hace todavía más disfuncional”, afirma Ávila.
Luego del consejo ministerial del pasado lunes, 14 de agosto donde los ministerios le rindieron cuentas sobre el avance de sus carteras al presidente, Gustavo Petro. Velasco negó que vaya a haber un remezón ministerial por la baja ejecución del presupuesto. “Lo que ha plantado el presidente no tiene que ver con un nuevo gabinete. Lo que él quiere es que haya más resultados”, concluyó.
El analista político, Carlos Arias, menciona que, “el ministro no solamente falló en obtener la presidencia del Senado y en algunas presidencias de las comisiones, sino también en rearmar la coalición para sacar las reformas”.
“Mal hace el ministro del Interior en descalificar o minimizar las necesidades”, agrego Arias.
Cabe destacar que el presidente Gustavo Petro, salió a la defensa del ministro del Interior indicándole a los gobernadores no interferir en la definición de su gabinete nacional.
En este sentido, el ministro enfrenta una tarea crucial al fungir como el vínculo unificador entre los distintos ministerios y sus proyectos colaborativos, impulsar una ejecución más efectiva y establecer conexiones sólidas en el Congreso en apoyo de las reformas.
