Ante la Fiscalía, Nicolás Petro aseguró que durante la campaña de su padre, el presidente Gustavo Petro, ingresaron fondos ilícitos. Según lo revelado en el proceso, el dinero que poseía Nicolás habría formado parte de la campaña en 2022 y se habría obtenido a través de actividades ilegales.
Este último acontecimiento añade un nuevo actor a la trama: el presidente de Ecopetrol, Ricardo Roa, quien previamente fue jefe de campaña de Gustavo Petro en su camino a la presidencia. La oposición no ha esperado para exigir la renuncia inmediata de Roa.
Ricardo Roa Barragán ha sido durante mucho tiempo una figura de confianza para el presidente de Colombia, Gustavo Petro. Como ejemplo de ello, el entonces alcalde de Bogotá le confió la Gerencia de TGI y posteriormente la Presidencia de la antes llamada Empresa de Energía de Bogotá (EEB), ahora conocida como Grupo Energía Bogotá (GEB). Además, en 2022, Roa asumió el cargo de jefe de campaña en la presidencia de Gustavo Petro.
Piden la renuncia de Ricardo Roa
La petición de la renuncia fue hecha por el representante a la Cámara, Juan Espinal, quien también instó a la Comisión de Acusación a investigar de inmediato las afirmaciones hechas por el hijo del presidente Gustavo Petro.
Hasta el momento, no ha habido declaraciones por parte de Roa ni del presidente Gustavo Petro sobre este asunto.
Según lo informado por Noticias Caracol, se ha mencionado que el presidente de Ecopetrol se encuentra fuera del país, pero está al tanto de la controversia y se espera que pronto haga un pronunciamiento al respecto.
Situación complicada para Ricardo Roa e impacto en la legitimidad del gobierno
El panorama para el empresario, Ricardo Roa, se ha vuelto complicado. Según el analista político Carlos Andrés Arias, experto en comunicación política y docente en la Universidad Externado, el hijo del presidente podría presentar pruebas de posibles fondos ilícitos o de sobrepasar los límites de financiamiento en la campaña, lo cual sería una situación grave y requeriría una inmediata investigación por parte de la comisión de acusaciones o absoluciones de la Cámara.
Roa, quien estuvo al frente de la campaña, podría estar involucrado en este proceso. Arias comenta que, aunque es improbable que haya consecuencias legales significativas, este escándalo afectaría la legitimidad del gobierno y generaría un gran revuelo mediático.
“Las declaraciones de Nicolás Petro son de suma gravedad, no solo en el ámbito político, sino también desde una perspectiva más compleja. Revelan la vulnerabilidad de la campaña y exponen un asunto muy delicado para los colombianos, que podría ser explotado por candidatos adversarios”, menciona Arias.
El analista argumenta que hechos como este evidencian que Gustavo Petro no representa el cambio y, al exponer a su hijo en un acto de venganza, perjudica considerablemente su imagen pública.
Arias asegura que las repercusiones de este caso también afectarán las elecciones regionales de octubre. Dado que Colombia se mueve por emociones complejas, cualquier campaña o candidato que sepa identificar y potenciar este aspecto podría perjudicar a los candidatos del pacto histórico en dichas elecciones.