Especial #30AñosDelApagón: ¿Qué hizo que Colombia se apagara en 1992?

Colombia conmemora 30 años desde que se llevó a cabo un hecho sin precedentes en la historia energética del país: un apagón que duró 11 meses

30 años del apagón en Colombia
30 años del apagón en Colombia. Foto: Señal Memoria
Especial 30 años del apagón en Colombia
Especial 30 años del apagón en Colombia

Colombia conmemora 30 años desde que se llevó a cabo un hecho sin precedentes en su historia energética: un apagón de 11 meses que, además de adelantarle una hora a los colombianos con la llamada ‘Hora Gaviria’, el periodo de racionamiento de energía eléctrica trajo lecciones que fortalecieron al sector energético con mejor regulación, vigilancia e inversión.

¿Por qué se apagó Colombia?

Hace 30 años el Estado, en cabeza del Gobierno Nacional, era el encargado del manejo de todo el sector eléctrico: la generación, transmisión, distribución, venta de energía. Adicionalmente, era quien fijaba las tarifas.

Cuando llegan los años 1991 y 1992 -antes de que el país se apagara, unos ocho o 10 meses antes- salió un Consejo Nacional de Política Económica y Social (Conpes) asegurando que no había razones para preocuparse, pues allí se indicaba que Colombia no corría el riesgo de un apagón.

Sobre todo, porque se confiaba en la capacidad instalada que había disponible en su momento: algo cercano a un 60 % más de lo que se necesitaba para cubrir la demanda total.

De acuerdo con Alejandro Castañeda, presidente de la Asociación Nacional de Empresas Generadoras (Andeg), en entrevista con Valora Analitik, hubo un error contundente en los cálculos y el análisis de la época: mucha de esa capacidad de generación de energía (más o menos el 73 % – 72 %) en ese momento era hidráulica y solo un 28 % era térmica.

«Eso pasó antes de que nos apagáramos. Pero, ¿por qué nos apagamos? Porque el nivel de los embalses se disminuye cuando llega un verano muy intenso o un Fenómeno de El Niño. Es cuando se le pide a las térmicas -que en ese momento era el mismo Gobierno- que empiecen a funcionar. Pero las térmicas no pudieron hacerlo por falta de mantenimiento y de inversión», relató Castañeda.

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Agregó que «como en ese entonces el Estado tenía tantas necesidades, y las térmicas nunca se usaban, lo que hacían en el Ministerio de Minas y de ISA -en su momento- era que ‘si yo no estoy usando la térmica para qué le voy a meter plata’ y se aplazaban los mantenimientos, hasta cuando ya se fueron a usar pues no funcionaron».

Así las cosas, cuando eso pasa -la combinación de altas temperaturas que evaporan el agua de los embalses con los que se genera energía y se le suman unas térmicas sin funcionar- las generadoras se gastan el agua que va quedando y para eso se empieza a ‘administrar el recurso’. Que en otras palabras, no es nada diferente a que se recurre a razonamientos de energía para que el sistema no se apague del todo.

Para el líder de Andeg, lo que no puede pasar es llegar a cero porque es completamente difícil recuperarse. «Ahí sí nunca recuperas eso».

De ahí se dio paso a los 11 meses de razonamiento entre finales de 1992 e inicios de 1993, así como otras medidas como la ‘Hora Gaviria’ -iniciativa de Juan Manuel Santos entonces ministro de Comercio Exterior- para aprovechar mejor las horas de luz natural.

Sin mencionar los efectos económicos que trajo consigo el apagón en Colombia: hay un estudio de la Contraloría General de la República que da cuenta de los efectos económicos en el que se expone cómo tal medida sacrificó varios puntos del Producto Interno Bruto (PIB) de Colombia al asumir los costos de ese apagón. Sin mencionar que de la deuda total de la Nación, el 40 % era del sector electrico.

Pues, como se sabe, el sector eléctrico necesita de unas inversiones que no son menores para poder crecer, fortalecerse y expandirse.

Es cuando el Gobierno Nacional en pocas palabras se ‘cansa’ -también porque esta es una industria riesgosa- y crea las leyes 142 y 143 que le dan vía libre a la inversión privada.

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«Ahí lo que se hace es un tema institucional de decir ‘mire el Estado tiene que conocer muy bien los roles que tiene: uno, la dirección de política -que está en una punta del triángulo-, otra es la supervisión y control, y la otra es la regulación. Esto tiene que estar separado porque antes todo lo hacía el Ministerio de Minas: definía las tarifas con Planeación, iba a las Juntas, miraba qué se invertía», le explicó a Valora Analitik Alejandro Castañeda.

Cortes de energía con el apagón en Colombia

Tras los errores cometidos en 1991, en febrero de 1992 el ministro de Minas y Energía de la época, Juan Camilo Restrepo, tomó la decisión de que Colombia tendría racionamientos de energía diarios, con el condicional de que serían solo pocas semanas.

Pero, de acuerdo con información de Señal Colombia, el racionamiento era inevitable pues la sequía agravó la crisis que ya existía en el sector y que se derivó en: insolvencia de algunos proveedores, falta de mantenimiento de la infraestructura, retrasos de cinco años y sobrecostos en la construcción de El Guavio (la hidroeléctrica que prometía modernizar el servicio).

Y los constantes desórdenes administrativos que ISA (la empresa encargada de la interconexión del país) tenía hace 30 años o más: un momento en el que, incluso, no contó con un director durante un año.

Como consecuencia, el racionamiento de energía empezó el dos de marzo de 1992 -inicialmente pensados para la tarde- que, posteriormente, se fueron extendiendo por más horas en el día (sobre todo en las que había mayor consumo energético), según información de Señal Colombia.

La iniciativa escaló tanto que, a mediados de año, el apagón ya era de nueve horas en Bogotá, diez en la costa Caribe y 18 en San Andrés.

«Los negocios que podían hacerlo compraron plantas eléctricas de gasolina, cuyo ruido acompañó las noches de numerosos sectores comerciales. En los barrios residenciales, por su parte, reinaron el silencio y la oscuridad, mientras la gente que pudo se refugió en sus casas a distraerse con la radio y los juegos de mesa», relató la entidad.

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¿Qué hacen las leyes 142 y 143?

Estas leyes fueron creadas -tras el apagón en Colombia- para permitir que se invierta en el sector eléctrico, pero desde la orilla de los privados y, también, para separar los roles que tenía el Estado y enfocarlos en:

  • La definición de políticas sectoriales
  • La supervisión y control
  • La regulación

Luego de estas leyes, nace la Comisión de Regulación de Energía y Gas (CREG) que comienza a estructurar todo el sistema eléctrico colombiano, con la que se hicieron muchos estudios, por ejemplo, el de una firma británica que recomendó la estructura de mercado que el país y la industria manejan en la actualidad.

Además, de acuerdo con Castañeda, en medio de esa discusión se creó el Cargo por Capacidad, que fue la ‘primera versión’ del Cargo por Confiabilidad que funciona hoy en día en Colombia.

En este video, Valora Analitik le cuenta más detalles sobre la historia del apagón en Colombia:

Recuerde que puede adelantar, atrasar y pausar el video tantas veces como necesite con la flechas que encontrará en la parte inferior del mismo)

Fuente: Ana María Lara RTVC, Radio Nacional de Colombia
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