Tras la salida de Felipe Bayón de la Presidencia de Ecopetrol el 31 de marzo de 2023, había un perfil muy sonado para ocupar el cargo: Ricardo Roa Barragán, quien, en efecto, fue nombrado como el nuevo líder de la petrolera en reemplazo de Bayón.
Roa Barragán es ingeniero mecánico de la Universidad Nacional de Colombia, cuenta con 28 años de experiencia en el sector energético colombiano y en los últimos 15 años ha ejercido cargos directivos en diferentes compañías en algunos países de América Latina como: Colombia, Perú, Brasil, Guatemala y Honduras.
Entre estas, la Central Termoeléctrica La Luna, Empresa Energía Honduras, la Transportadora de Gas Internacional (TGI), Renewable Energy Company y Celco.
En suma, el nuevo presidente de Ecopetrol hizo parte de varias juntas directivas de empresas pertenecientes al sector energético: Emgesa, Codensa, Gas Natural, Rep Perú y Contugas, entre otras.
Ricardo Roa fue gerente general de Cesco SAS y director de Renewable Energy Company. También fue catedrático de la Universidad Nacional, Antonio Nariño y Externado de Colombia. Además, fue director de comercialización de energía de la Organización Ardila Lulle y presidente de la Central Termoeléctrica La Luna.
Recomendado: Ricardo Roa, entre los candidatos de Petro para reemplazar a Felipe Bayón en Ecopetrol
Vale recordar que estuvo como asesor técnico para la Delegatura de Energía y Gas de la Superintendencia de Servicios Públicos, director sectorial de Energía y Gas de Andesco, gerente comercial y general de la Electrificadora de Santander ESSA.
Episodios complejos de Ricardo Roa Barragán
Ricardo Roa Barragán ha sido por años el hombre de confianza del presidente de Colombia, Gustavo Petro. Ejemplo de ello, el entonces alcalde de Bogotá le confió la Gerencia de TGI y luego la Presidencia de la antes llamada Empresa de Energía de Bogotá -EEB- (hoy Grupo Energía Bogotá -GEB-). Así como en 2022, se convirtió en el jefe de su campaña presidencial.
Sin embargo, ha habido un par de episodios que salpicarían sus gestiones: de acuerdo con la Agencia API, el entonces Partido de Integración Ciudadana (PIN) -que luego se convertiría en Opción Ciudadana- aseguró que los congresistas santandereanos Oscar José Reyes, Alfonso Riaño y Luis Alberto Gil, exmilitantes del M-19 que presuntamente tenían vínculos con paramilitares, fueron señalados de haber influido desde la cárcel para que Roa Barragán fuera nombrado en TGI y luego en la EEB.
El supuesto vaso comunicante que se endilgó fue una aparente amistad cuando Oscar Reyes se desempeñó como congresista de Santander y Roa como gerente de la antigua Empresa Electrificadora de Santander, ESSA.
En su momento la prensa local inició las averiguaciones del caso pero estas se fueron desdibujando con el tiempo hasta el 2014 cuando salió a desmentirlas. «No tengo vinculaciones, no las he tenido jamás en mi vida profesional con partido político o movimiento político algún» aseguró en su momento a Caracol Radio.
(Párrafo textual de API)
Recomendado: Gobierno Petro y Ecopetrol se reunirán para definir futuro de contratos de petróleo y gas
En 2015 aproximadamente, la Contraloría de Bogotá remitió un informe final de visita de control fiscal de la gestión de 2012, 2013 y 2014, en la cual se dejaron unas instrucciones a seguir en pro del mejoramiento de la empresa, pero también una advertencia.
Según API, el órgano de control determinó que, contrario al artículo 335 de la constitución la Empresa de Energía de Bogotá, se entregaron a título de donación $1.238 millones a la Fundación Grupo de Energía. Y expuso unos contratos los cuales debían «ser objeto de revisión detallada en una auditoría de desempeño».
«A través de los medios de comunicación, en enero de 2016, Roa Barragán se enteró que había sido destituido de su cargo y en su reemplazo fue nombrada Astrid Álvarez«, citó el medio de comunicación.
Por otro lado, en 2019, Roa Barragán se desempeñó como gerente de la Empresa de Energía de Honduras (EEH), en la cual tuvo una fuerte confrontación con el gobierno del país centroamericano tras su salida, según información de API. En su momento, el mismo Roa manifestó ante la opinión pública que interpondría una demanda internacional en contra de Honduras por US$805 millones.
(Con información de API)