El sector tecnológico presenta nuevos retos para empresas en términos de seguridad, almacenamiento y simplificar operaciones.
En Dell creen que el 2023 recompensará a las empresas que lleguen preparadas, con conciencia del momento que vive el sector tecnológico.
Por ello, David Hernández, gerente general de Dell redactó las claves que ayudarán a las empresas a adaptarse a los retos tecnológicos de 2023.
A medida que avanza la transformación de la fuerza de trabajo, las personas demandan herramientas para ser productivas desde cualquier lugar y eso crea nuevas necesidades en materia de acceso y seguridad.
Las organizaciones seguirán utilizando las múltiples alternativas que les ofrece la nube para el manejo de su trabajo, de datos y la información como fuente de generación de valor para sus negocios.
Como encargados de dictar las políticas y las acciones del área informática de una organización, los CIO deben tener estrategias que reconozcan este momento.
Un CIO es el chief information officer, es decir, el responsable de sistemas y tecnologías de la información de la empresa.
Los retos tecnológicos que debe manejar un CIO
- No usar infraestructura de nube sin entender su costo a largo plazo. No es suficiente elegir un entorno de nube que funcione, es necesario entender al detalle el costo a corto, mediano y largo plazo.
Eso significa usar las herramientas disponibles no solo de una manera tecnológicamente sofisticada, sino económicamente sofisticada también.
- Tener un plan de manejo y control transversal a todas las estructuras de nube en uso en la organización. Las políticas fragmentadas y los flujos dispersos de información debilitan la operación y aumentan las vulnerabilidades.
Es indispensable definir el plan zero trust para la multinube.
Desde el punto de vista de la seguridad, eso significa definir los comportamientos adecuados en lugar de solo buscar prevenir los comportamientos prohibidos.
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En un entorno zero trust todo es autenticado y autorizado, no hay entidades, usuarios, dispositivos o datos desconocidos y, por lo tanto, es posible un cambio de paradigma más acorde a esa nueva arquitectura.
- Dotar de un solo marco funcional a todos los recursos de manejo de amenazas.
Esta clase de integración es posible y hace que las personas encargadas, y la organización como tal, puedan responder de manera más expedita en caso de ataque.
La fórmula es identificar fortalezas y vulnerabilidades, proteger los servicios de infraestructura crítica, detectar todo evento de ciberseguridad, responder a los incidentes de manera efectiva y recuperar servicios que puedan haberse visto afectados.
- Conocer con claridad la protección de las operaciones Edge. Maximizar el potencial comienza con la simplificación de las operaciones.
Innovar libremente en las operaciones Edge implica entender sus desafíos.
Dell está acelerando el desarrollo de una plataforma de software que aborda los puntos débiles, se adapta a sus necesidades e impulsa la innovación en el borde.
- Definir los puntos de la organización que se protegerán primero con criptografía post-cuántica.
Aunque la computación cuántica suena lejana, actores maliciosos están recogiendo datos confidenciales encriptados, imposibles de acceder, confiando en que cuando dispongan de recursos de computación post-cuántica podrán desencriptarlos.
Es una amenaza futura, pero sumamente real y que implica hacer una cartografía del uso de criptografía en la organización. Los CIO de hoy no pueden permitirse dejar pasar 2023 sin educarse, y a su equipo, sobre lo que implica la computación cuántica.