La transformación digital ha cambiado las modalidades de pago y el uso del dinero, pues actualmente ha proliferado una gran cantidad de bancos digitales que ofrecen una calidad de servicio sin contacto físico. Además, algunas fintech ofrecen créditos sin necesidad de tener una cuenta bancaria.
Las oportunidades de estas son una realidad palpable que se ha establecido con buenas bases en la economía y el mercado colombiano.
Hay más alternativas para obtener tarjetas virtuales solicitadas desde celulares, hacer pagos online de servicios y comprar de productos desde su hogar, ahorrando tiempo y permitiendo un control y análisis de gastos.
Por esto los establecimientos locales se esfuerzan por alcanzar condiciones favorables en el comercio transfronterizo de manera segura. Rapyd, una empresa global de servicios de tecnología financiera destaca cómo las cuentas virtuales son un medio eficaz para lograrlo y cómo aprovecharlas.
«Para los exportadores, cualquier venta suele comenzar como una cuenta por cobrar que sólo se completa cuando se recibe el pago; mientras que, para los importadores, cualquier pago genera confianza para futuros pedidos. Para ambos, la recepción rápida y segura del cobro constituye un gran beneficio para su negocio”, señala Juan Huezo, director senior de estrategia de producto de Rapyd.
Según el DANE, las exportaciones de julio de 2022, en Colombia, alcanzaron los US$ 5.913 millones FOB, cifra que corresponde al precio de venta de las mercancías enviadas a otros países, sin incluir el costo de los seguros y fletes, que a su vez mostró un incremento de 71,7 % frente al mismo periodo de 2021.
Beneficios de crear cuentas virtuales para los pagos internacionales:
1. Simplificar el cobro en efectivo: permite estar presente en cualquier país, con su propia moneda, y cobrar con todas las ventajas de una cuenta bancaria local.
«Las cuentas virtuales garantizan la seguridad de las transferencias de dinero y una mayor visibilidad del flujo de efectivo. También ayudan a organizar y proporcionar una gestión más clara para los pagos transfronterizos con múltiples clientes», destacó Huezo.
Destacado: En Colombia, compras con billeteras digitales aumentan un 37%
2. Disponibilidad inmediata: las transferencias internacionales pueden tardar muchos días en llegar a su destino. Cuando se utilizan cuentas virtuales, el pago se procesa a la velocidad del sistema de compensación del banco local, el cual funciona en tiempo real. En la mayoría de los casos, los pagos entrantes se abonan al instante, de manera que los fondos pueden pagarse inmediatamente, lo que simplifica y agiliza la gestión del efectivo.
3. Se reduce la exposición: Al utilizar cuentas virtuales con un proveedor internacional, los clientes pueden ahorrar dinero en cambios de divisas y tasas de conversión y ahorrar tiempo al evitar el uso de varios intermediarios.
Es más sencillo hacer un seguimiento de los importes y las fuentes de pago con las cuentas virtuales que con las transferencias bancarias. Con las primeras, los importadores pueden emplear vías de pago locales que resultan más cómodas y los exportadores obtienen una mayor visibilidad y, lo que es más importante, se agilizan los pagos y se reducen los retrasos.
4. Capital de trabajo: Los pagos cobrados, incluidos los de gran cuantía, se registran inmediatamente, sin estar sujetos a ningún riesgo o retención de cumplimiento que es común con las transferencias internacionales debido a las operaciones bancarias manuales. Como resultado, la mayoría de los clientes obtienen crédito instantáneo, por lo que los fondos pueden desembolsarse en tiempo real.
Entre los métodos tradicionales de pago más comunes en el comercio internacional se encuentran: consignación, cuenta abierta, recogida de documentos, cartas de crédito y anticipo.
Cada una de estas opciones tiene sus propias complejidades a la hora de crear condiciones internacionales, e incluso éstas no son siempre ideales para una situación comercial en particular.
«En lugar de mantener cuentas bancarias en cada uno de los países en los que se desarrollan los negocios para mitigar el riesgo de tipo de cambio, con su servicio de cuentas virtuales, Rapyd permite a los comercios realizar sus pagos internacionales sin restricciones y de forma segura, pues funciona de forma integrada, bajo un único producto financiero que llega a más de 40 países y admite 25 monedas diferentes», concluye Huezo.