Emprender es un reto para aquellos que están decididos en apostarle a su talento o producto innovador, con un diferencial que lo posicionará en el mercado y hará que los clientes prefieran adquirir el servicio o producto con esa persona que se atrevió.
Los emprendedores deben dedicarse a su negocio de lleno, madrugar mientras otros duermen, administrar el tiempo de manera efectiva, destinar la mayoría de sus ahorros e ingresos al emprendimiento y hallar espacios para la creatividad.
Según un Estudio realizado por GEM Colombia en el 2020, Colombia presentó una tasa de actividad emprendedora (TEA) del 31,1 %, compuesta en mayor proporción por emprendedores nacientes con el 55 %, es decir, aquellos que estuvieron involucrados en el proceso de puesta en marcha de su negocio hasta por tres meses, pero no pagaron salario o recibieron algún tipo de remuneración.
Los nuevos emprendedores llegaron a 45 %. Estos son quienes tuvieron emprendimientos entre los 3 y 42 meses y que sí pagaron salarios o recibieron algún tipo de retribución.
Tips para que su negocio sea próspero
Si desea mejorar sus hábitos para ser más competente y resiliente con su negocio, o planea crear uno pronto, practique estos consejos:
1. Escribir: plasmar de manera clara y efectiva las ideas, críticas constructivas y hasta sus sentimientos. Esto le ayudará a mejorar el orden y construir buena reputación.
Anotar una meta o proyecto con fechas y metodología generará recordación y establecerá un tiempo límite. No solo puede ser en papel, lo puede hacer en su computador o celular, pues mejorará la comunicación efectiva.
2. Hablar en público: esta es una habilidad indispensable si desea que su negocio se expanda sin límites. Se puede aprender, practicar y mejorar desde su hogar u oficina y con sus clientes, así sea para presentar algo mínimo. La práctica hace al maestro.
También puede aplicar consejos como hablar con un lápiz en la boca, mejorar la respiración, tener un esfero en la mano mientras habla para reducir los nervios, entre otros.
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3. Diseño del producto: haga un análisis de cuáles son las necesidades del cliente y, con base en los resultados, ofrezca el producto que será la solución.
Debe comunicar su habilidad con claridad para atraer no solo a clientes, también a inversionistas, socios y otras partes interesadas.
4. Persuasión: esta cualidad es un requisito para los empresarios. Implica ser un aliado de los clientes al brindarles información que le ayuden a tomar la mejor decisión.
Ojo, persuadir no es lo mismo que manipular o intimidar, pues es una habilidad para que el cliente se decida a realizar cosas que en el fondo quiere hacer. Solo falta que se dé cuenta de esa necesidad de hacerlo.
Aunque es una cualidad que va en unas personalidades intrínsicamente, se puede aprender y pulir con talleres y experiencia.
5. Contabilidad: el dueño de cualquier negocio debe estar capacitado para entender e interpretar estados financieros de la empresa. Es importante saber cómo se maneja el dinero que entra y sale de la organización.
Hay paquetes de software que facilitan la gestión de finanzas de la empresa. Si no se identifica con ninguno, no dude en acudir a un experto en cuestiones contables para tener el tema económico bajo control.
