Este año el debate sobre el aumento del salario mínimo en Colombia despertó particularmente temprano. Tanques de pensamiento como Fedesarrollo aseguran que será clave poner sobre la mesa la discusión con antelación por la inflación en dos dígitos.
Lo cierto es que en la decisión de fijar el alza del salario pasará por varias manos. Hacia octubre-noviembre de 2022, la mesa de concertación de políticas salariales, que es permanente, empezará a hablar del alza.
Esta mesa de concertación es tripartita. De un lado están los empresarios y del otro los trabajadores, representados a través de las distintas centrales obreras y sindicatos del país. El tercero en juego es el Gobierno, que hace las veces de mediador.
Lo que suele ocurrir es que los empresarios llegan con su propuesta, así como los trabajadores, y, con base en estos datos, empieza la negociación.
Hay que recordar que el alza del salario mínimo no puede estar por debajo del dato de inflación del año que prevea el Banco de la República.
Variables que se tienen en cuenta
Entonces, en el marco de la discusión, también entran actores como el emisor, para entregar la expectativa final de inflación y también el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE), encargado de suministrar la cifra de productividad.
La mesa se encarga de concertar el alza de salario mínimo, pero en caso de llegar a un acuerdo entre las partes, será el gobierno el que decida.
Lo anterior quiere decir que, en caso de que trabajadores y empresarios no lleguen a fijar una cifra, el presidente Gustavo Petro, mediante decreto, será el encargado de que se establezca el aumento del salario mínimo de 2022.
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Vale recordar que el aumento del salario mínimo en Colombia en 2022 fue del 10,07 %, llevando el pago al millón de pesos y $117.172 de subsidio de transporte.
