José Antonio Ocampo, ministro de Hacienda de Colombia, amplió el alcance de la reforma tributaria para el país. Empezó diciendo Ocampo que la tributación efectiva de Colombia sigue siendo muy débil. El porcentaje de renta de las personas naturales son apenas el 18 % de los recaudos, contra un promedio del 51 % en la OCDE.
Dijo Ocampo que se espera, con esta reforma, erradicar el hambre, que mitigue la pobreza y se cuente con un sistema que reduzca las exenciones. Pero aún así el 98 % de la población colombiana no se va a afectar de manera negativa con la propuesta de reforma tributaria.
Entonces, la idea es reducir los beneficios tributarios para los segmentos de mayores ingresos y con la idea de redistribuir en favor de los pilares más vulnerables. Al tiempo que se busca tener los recursos suficientes para hacer cumplir el gasto social.
La idea es simplificar el impuesto de renta: todos los tipos de ingreso cuenta por igual. Hay un solo ingreso, que es el consolidado de todas las fuentes: salarios, pensiones, dividendos, a ganancias ocasionales, todos lo ingresos suman por igual y son sujetos a la escala progresiva tributaria.
“Se hace para limitar beneficios tributarios. El objetivo es que paguen lo que ganan más de $10 millones mensuales, por lo que limitamos esos beneficios. Al tiempo que no se modifica el umbral de ingresos al cual se tributa”, agregó Ocampo.
Lo que se hace en este sentido es que no hay grandes cambios en materia de renta laboral, pero las pensiones de más de $10 millones mensuales sí pagarán, iniciativa que además afecta solo al 0,2 % de la población colombiana.
Dividendos y otros ingresos
Para los dividendos la propuesta en la reforma es que cambie la tarifa del 10 % para las tarifas marginales, por lo que se amplía el tramo con tarifa de 0 % y cambia de $12 millones a $45 millones.
Lo clave acá es entender que se tratan los dividendos como todo otro ingreso, el dividendo que recibe una persona natural debe entender como un salario, o pensión, dijo Ocampo. Todos los ingresos son iguales porque los sectores de más altos ingresos solamente tienden a recibir ese tipo de ingresos, como los dividendos.
Para el caso de las ganancias ocasionales en personas naturales, las tarifas de 10 % (para herencias donaciones y enajenaciones de activos) y rifas y loterías (20 %) ahora se toman como cualquier ingreso.
La propuesta concreta en ese sentido es que se eliminen las exenciones injustificadas y la modificación de otras para aumentar el recaudo a manos de “los más pudientes”.
Finalmente, recordó Ocampo que, para el caso de Patrimonio, se propone un impuesto permanente al patrimonio con un esquema de tarifas marginales en función justamente del valor del patrimonio. Este se cobrará entonces desde los $3.000 millones.
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En esta propuesta se complementa con la modificación de la valorización de las acciones de costo histórico a valor intrínseco.
Todo esto bajo la propuesta de una renta exenta de $500 millones para proteger la vivienda de habitación.
