El presidente Gustavo Petro llega a su primer semestre de mandato en Colombia con la tarea de sacar adelante, en el Congreso de la República, una reforma tributaria que no afecte a la clase media, ni a las clases más vulnerables del país.
Ha mencionado Petro, en varias ocasiones, que si no se aprueba esta reforma tributaria, bajo el principio de que quienes más tienen más paguen, no habrá entonces la tan apoyada coalición de Gobierno.
Los puntos que se saben de la reforma tributaria
- Pagarán los que tengan más: la idea de esta reforma tributaria es que quienes reciben más de $10 millones al mes, que es el 1 % de la población en Colombia, tributen más. Esto incluye el desmonte de algunas exenciones y beneficios tributarios. Este desmonte, se ha conocido, incluiría al Ahorro para el Fomento de la Construcción (AFC), con un tope de 700 UVT.
- Impuesto al patrimonio: la idea que tiene el ministro de Hacienda, José Antonio Ocampo, es que al país regrese el impuesto al patrimonio para aquellos que superen los $2.000 millones. En un principio se dijo que este tope iba a ser de $1.000 millones.
- Impuestos saludables: la idea del gobierno entrante no es generar un recaudo importante del lado de esta iniciativa toda vez que su éxito estará justamente que no se aumente el recaudo por algunos alimentos. Se impondrán nuevos impuestos a las bebidas azucaradas y alimentos ultraprocesados para cambiar hábitos de consumo.
- Cambios al impuesto por ganancia ocasional: la idea del gobierno entrante es que, según la nueva reforma tributaria, la tarifa correspondiente al 10 % para la ganancia ocasional repunte hasta el 20 %.
- Eliminar exenciones a empresas: la idea es seguir desmontando una serie de beneficios para las empresas más grandes del país que se aprobaron en la más reciente reforma tributaria. Todavía no se advierte cuáles serían.
- Zonas francas: el establecimiento de un mínimo de exportaciones para poder optar por el beneficio. En caso de que no se cumpla, la tarifa de tributación será del 35 %.
- Incentivos: se plantea la posibilidad de que se le dé forma a una nueva política de aumento a la productividad para sectores industriales y del agro.
- Lucha más intensa contra la evasión y elusión: la reforma tributaria pretende establecer sanciones más severas para quienes engañen al sistema fiscal colombiano, incluso con penas carcelarias.
De momento, se ha dicho que esta reforma tributaria va a radicarse ante el Congreso de la República después de este 8 de agosto.
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La idea del gobierno de Petro es que esta reforma tributaria logre un recaudo del orden de los $50 billones en los próximos cuatro años.
Y, en caso de que cumpla con más expectativas, Ocampo ha manifestado que se podría venir una segunda reforma tributaria en la que se lideren cambios que beneficien a los empresarios de Colombia.
