Ante la Comisión Tercera de la Cámara de Representantes de Colombia, el gerente del Banco de la República, Leonardo Villar, detalló las perspectivas que tienen desde el emisor para el comportamiento de la economía colombiana.
Explicó Villar que, si bien el crecimiento de la actividad económica ha superado las expectativas, un aumento vertiginoso de la producción ha llevado a fenómenos de cuidado.
De un lado, dijo Villar, la producción en Colombia no le está siguiendo el paso a la demanda y al consumo, causa de que el país vea un aumento sustancial de las importaciones para suplir ese faltante.
“El aumento de las importaciones del 45 % en dólares, frente al primer trimestre del año pasado, es extraordinariamente alto y que genera dificultades”, dijo Villar.
Para el gerente del emisor, el déficit comercial del país es para tener muy en cuenta, toda vez que está en máximos desde 2015, momento en el que hubo un desplome del precio del petróleo, condición muy distinta a la que se ve ahora.
Perspectivas de inflación
Adicionalmente, Villar abordó las preocupaciones que se desencadenan sobre los precios y la inflación, que es un fenómeno que se explica por factores externos.
Reiteró que cerca del 80 % de los ítems de la canasta familiar crece en precios arriba de la meta del Banco de la República, un fenómeno que sigue siendo preocupante, reiteró Villar, para el comportamiento de la reactivación económica.
En ese sentido, Villar añadió que el aumento de las tasas de interés deberá seguir y, sobre el ritmo, advirtió que va a depender de lo que vayan informando los datos de la economía nacional en el marco de cada decisión de la Junta Directiva del emisor.
“Es un proceso que continúa y no podemos decir la velocidad, cuando la inflación esté convergiendo a los niveles de la meta podremos decir que hemos llegado a un nivel en el que la tasa de interés no debe aumentarse más”, advirtió Villar.
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Todavía con ese escenario, Villar explicó que el país ha liderado un proceso de normalización pero que eventualmente puede ser el comienzo de una contracción monetaria, de ver un proceso contractivo.
“Eso no es porque hayamos cambiado nuestra estrategia de ser contracíclicos es precisamente porque seguimos contracíclicos y la contraciclicidad hoy exige ser restrictivos”, añadió Villar.
Concluyó diciendo que el ritmo de las alzas de interés no ha sido desbordado, más lento que en otros países incluso, pero que es firme y muestra un compromiso del Banco de la República sobre empujar la inflación hasta la meta del 3 %.
