Los únicos dos pozos de gas de esquisto del Reino Unido van a ser abandonados después de que el regulador del sector ordenara su sellado. Vea más noticias de Minería y Energía.
Los pozos de Lancashire no se han utilizado desde 2019 después de que se suspendieran las perforaciones de prueba debido a los temblores de tierra y el gobierno detuviera la extracción de gas de esquisto en Inglaterra.
La Autoridad del Petróleo y el Gas (OGA) ordenó que ahora se taponen con hormigón.
Los propietarios del yacimiento, la empresa energética Cuadrilla, dijeron que la decisión era «ridícula» en medio del aumento de los precios del gas.
Los pozos de Preston New Road fueron los primeros en realizar una fracturación horizontal en tierra firme en el Reino Unido, un proceso que libera gas de la roca de esquisto.
El proceso ha sido controvertido y las pruebas de perforación se han visto afectadas por numerosos retrasos y protestas, incluida una que duró poco menos de 100 horas.
Después de que en agosto de 2019 se registrara un terremoto de magnitud 2,9 cerca del emplazamiento, la OGA llegó a la conclusión de que no era posible predecir el tamaño de los temblores provocados por la práctica.
En noviembre siguiente, el gobierno detuvo el fracking y la exploración con efecto inmediato.
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El director ejecutivo de Cuadrilla, Francis Egan, dijo que la orden de la OGA «no había sido bien pensada» en medio de una «crisis energética».
«Será increíblemente costoso y difícil rectificar este error», dijo.
«Lo que es más ridículo es que dejar nuestro propio gas de esquisto en el suelo hará aún más difícil la reducción de las emisiones globales».
«El gas de esquisto del norte de Inglaterra tiene el potencial de satisfacer las necesidades energéticas del Reino Unido durante décadas, pero los ministros han elegido ahora, en plena crisis energética, llevarnos a este punto».
Sin embargo, el portavoz oficial del primer ministro dijo que el gas de esquisto procedente de la fracturación hidráulica «no es una solución a corto plazo» y que «aún no está probado como recurso en el Reino Unido».
Dijo que el desarrollo de fuentes de energía domésticas «debe ser seguro y causar el mínimo trastorno y daño a quienes viven y trabajan en las cercanías».
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«Terminamos el apoyo al fracking basándonos en pruebas científicas, por lo que cualquier desarrollo posterior tendría que pasar por los procesos necesarios», dijo.
Añadió que incluso si la moratoria «se levantara mañana, es poco probable que haya cantidades suficientes de gas disponibles para hacer frente a los altos precios que afectan a toda Europa y no tendría ningún impacto en los precios a corto plazo».
Con información de BBC.
