La Junta Directiva del Banco de la República de Colombia aumentó en 50 puntos básicos las tasas de interés, llevando el dato al 3 %, en una votación en la que tres, de los siete miembros, pidieron que el aumento de las tasas de interés fuera de 75 puntos básicos.
De acuerdo con Leonardo Villar, gerente del emisor, la decisión se tomó teniendo en cuenta que la inflación anual en noviembre “sorprendió al alza registrando un incremento de 68 puntos básicos respecto a la registrada en octubre, con lo cual se ubicó en 5,26 %”.
Esto último al tiempo que la inflación básica anual (IPC sin alimentos ni regulados) mostró una tendencia creciente al situarse en 2,54 %, 52 puntos básicos por encima del nivel de octubre.
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Explicó entonces Villar que estos resultados llevaron a una revisión del pronóstico de inflación a 5,3 % para 2021 y a 3,7 % para 2022.
Y, en ese escenario, Villar explicó que el reciente anuncio de aumentar el salario mínimo de Colombia en 2022 en 10,07 % se convierte en una variable sustancial a tener en cuenta.
Sobre el punto, Villar aseguró que el incremento del salario mínimo genera “un reto particularmente fuerte para el Banco de la República y para el cumplimiento de su mandato constitucional. Ese reto es mantener la inflación baja y estable y ahora se vuelve importante para que el aumento de los salarios nominales no afecte precios de la economía nacional y el poder adquisitivo de los trabajadores”.
Otras variables de análisis
En el marco de la Junta Directiva, el emisor explicó que en 2021 el déficit en cuenta corriente alcanzaría un nivel de 5,6 % del PIB por el crecimiento de la demanda interna.
Mientras que para 2022 se espera una reducción del déficit de la cuenta corriente a 4,9 % del PIB, “en un contexto financiero internacional menos holgado”.
Finalmente, el emisor sigue de cerca el hecho de que las expectativas de inflación han aumentado y se ubican por encima de la meta de 3 %, también en el mediano plazo. “Ello implica el riesgo de inducir procesos de indexación a mayores niveles de inflación”.
Finalmente, el Banco de la República se sostiene en el compromiso de tener una meta de inflación de 3 % anual, “y seguirá tomando las decisiones requeridas para asegurar la convergencia de la inflación hacia dicha meta”.
