5 puntos clave de la nueva hoja de ruta del hidrógeno en Colombia

El Gobierno de Colombia publicó este jueves el borrador de la hoja de ruta para impulsar la producción y exportación de hidrógeno.

El Gobierno de Colombia publicó este jueves el borrador de la hoja de ruta que se tomará como referencia para impulsar la producción y exportación de hidrógeno como una fuente de energía renovable y de cero (o muy bajas) emisiones de dióxido de carbono (CO2). Para más información de energía haga clic aquí.

La estrategia elaborada se cimienta en cinco pilares que buscan el desarrollo social, medioambiental y económico de Colombia, y que son el fruto de un trabajo colaborativo de múltiples actores públicos y privados:

1. El hidrógeno como una pieza clave en la descarbonización nacional

Colombia se ha comprometido con un ambicioso objetivo de descarbonización durante la próxima década con vistas a objetivos más ambiciosos en el largo plazo. El hidrógeno de bajas emisiones y sus derivados serán una herramienta más para una descarbonización profunda de la economía y su despliegue atenderá a razones de costo-beneficio.

El hidrógeno tendrá cabida en aplicaciones en las que la electrificación no es viable o no hay otros energéticos adecuados desde un punto de vista de costo, ambiental o técnico. Aplicaciones como el transporte pesado de larga distancia, el transporte aéreo y marítimo, así como distintos sectores industriales se beneficiarán de estos energéticos.

Según el ejecutivo, el hidrógeno verde facilitará además el despliegue e integración de mayor capacidad de generación de Fncer favoreciendo una economía sostenible, facilitando la gestión del sistema y habilitando el transporte y el almacenamiento de energía.

2. El desarrollo de la cadena de valor del hidrógeno como vía hacia una economía de exportación de bajas emisiones

Colombia dispone de un posicionamiento geoestratégico entre dos océanos con acceso a las principales economías, así como de áreas geográficas con recursos naturales para la producción de energía renovable equiparables a las mejores del mundo.

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Esto permitirá a Colombia competir en un mercado global en el que las grandes economías industriales importarán hidrógeno de bajas emisiones para cumplir sus objetivos de descarbonización. Para ello, será necesaria la cooperación con dichos países de modo que se pueda acceder a tecnología, capacitación e inversión que posicionen a Colombia en un mercado incipiente.

La exportación de energéticos de origen fósil es uno de los pilares de la balanza comercial colombiana. Sin embargo, la transición global hacia una economía de bajas emisiones dará lugar a una progresiva reducción de las exportaciones de estos energéticos hacia nuestros principales clientes internacionales y su uso en la propia Colombia.

La producción y exportación de hidrógeno aprovechando los recursos naturales colombianos equilibrará la disminución del peso de los energéticos tradicionales en nuestra economía.

El hidrógeno atraerá inversiones y generará nuevos empleos de manera que la descarbonización sea un impulso para la economía colombiana. El Gobierno y las autoridades aprovecharán el hidrógeno, no solo para su exportación sino para el desarrollar nueva capacidad industrial nacional.

3. El hidrógeno como habilitador de una transición energética justa

El hidrógeno de bajas emisiones es una oportunidad para la transición justa de los sectores afectados por la descarbonización a la vez que abre nuevas puertas para la creación de nuevo tejido industrial que aprovecha la competitividad del hidrógeno producido en Colombia.

El despliegue de la industria del hidrógeno de bajas emisiones en zonas mineras y petroleras se beneficiará del aprovechamiento de las infraestructuras y capacidades existentes permitiendo una transición justa y equilibrada.

De igual forma, el hidrógeno verde abre nuevas oportunidades de desarrollo local en nuevas regiones con alto potencial de producción de energías renovables contribuyendo a un desarrollo económico equilibrado y cohesivo entre territorios.

4. El Gobierno Nacional comprometido con el despliegue del hidrógeno de bajas emisiones

El Gobierno tiene un claro compromiso con el despliegue del hidrógeno de bajas emisiones como motor de desarrollo económico, social y medioambiental. Sin embargo, estamos en las primeras fases de creación de esta industria a nivel global y debe establecerse un marco regulatorio y de incentivos que favorezca la implantación de los primeros pilotos.

El Gobierno desarrollará en el corto plazo un marco regulatorio transparente, predecible y estable, junto con una estrategia de incentivos, y comenzará con el planeamiento integrado de infraestructuras que permitan los primeros despliegues.

Dichas iniciativas involucrarán al sector privado, la academia y la sociedad civil como actores clave en el despegue de la industria en Colombia.

5. El hidrógeno como vía de vertebración del territorio y herramienta de desarrollo inclusivo

El desarrollo de la economía del hidrógeno pondrá en el centro a las comunidades desde el inicio, teniendo en cuenta su situación actual, necesidades, aspiraciones y capacidades.

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El Gobierno y autoridades locales pondrán en marcha un plan de socialización que traslade el potencial del hidrógeno para transformar económicamente las comunidades mediante la generación equilibrada de riqueza y empleo a la vez que se capacita el personal y se protegen los recursos naturales, las personas y el medio ambiente.

Se involucrará a las comunidades en el dialogo a cerca de las oportunidades para el territorio de las Fncer en general, y el hidrógeno en particular, situándolas en el centro de la planeación territorial y económica.

El diálogo involucrará también a los promotores para definir las mejores prácticas para el desarrollo económico local favoreciendo la creación compartida de valor.

Metas a 2030

Se han establecido ambiciosas metas nacionales a 2030 cuya consecución permitirá desarrollar las capacidades técnicas e industriales y la experiencia necesaria para poder aprovechar el todo el potencial futuro del hidrógeno.

Los instrumentos principales para alcanzar los objetivos fijados a 2030 son las medidas descritas en los ejes de actuación que se detallan en el capítulo siguiente.

Metas de H2 de bajas emisiones

En lo relativo a la producción de hidrógeno de bajas emisiones se espera a 2030:

• Instalar al menos 1 GW de electrólisis que se ubicarán tanto en regiones de alto recurso renovable como La Guajira, como en lugares próximos al consumo con el objetivo de minimizar los costos asociados al transporte.

• Alcanzar un hidrógeno verde competitivo, logrando costos de 1,7 USD/kg cuando se produzca en las zonas de recurso renovable óptimo.

• Producción de al menos 50 kt de hidrógeno azul mediante la construcción de nuevas plantas y aplicación de captura y almacenamiento de CO2 (CCS) a plantas existentes.

Respecto a la demanda de hidrógeno, se prevé una importante penetración en sectores industriales, principalmente en refinación e industrias química y fertilizantes, así como un comienzo de la demanda en el sector de transporte terrestre. En estos sectores se espera alcanzar a 2030:

• Flota de al menos 1.500 – 2.000 vehículos ligeros de pila de combustible para transporte de pasajeros y carga. Se considera esencial fomentar el desarrollo de hidrogeneras en grandes núcleos de población, fomentando la adquisición de vehículos de hidrógeno para aplicaciones de gran recorrido como taxis o furgonetas de reparto.

• Flota de al menos 1.000 – 1.500 vehículos pesados de pila de combustible para transporte de pasajeros y carga. Se pondrá foco en el despliegue de hidrogeneras en rutas de gran tránsito de vehículos que conecten ciudades del país, fomentando la adopción de esta tecnología por empresas de transporte de mercancías y pasajeros.

Además, derivado de la Estrategia Nacional de Movilidad Eléctrica Sostenible, se prevé una importante participación del hidrógeno dentro de la flota de buses intermunicipales del país.

• Red de al menos 50 – 100 hidrogeneras de acceso público para el repostaje de los vehículos anteriores. Estas estaciones se concentrarán en grandes núcleos de población y rutas comerciales, garantizando una alta demanda de hidrógeno y su viabilidad económica.

• Consumo de un 40 % de hidrógeno de bajas emisiones en el sector industrial respecto del total del hidrógeno consumido en el sector, considerando tanto el consumo de hidrógeno como materia prima, como su uso como fuente energética.

Las metas anteriores habilitarán dos objetivos transversales:

• Movilizar más de 2.500 millones de dólares de inversión durante el periodo 2020/30, las cuales provendrán mayormente del sector privado, pero que contarán con el apoyo público necesario en los casos en los que se precise.

Esta inversión generará un efecto multiplicador en toda la cadena de valor del hidrógeno en términos de creación de riqueza y empleo.

• Contribuir a la descarbonización de Colombia con el abatimiento de 2,5 – 3 millones de toneladas de CO2eq durante el periodo 2020/30 gracias al uso de hidrógeno de bajas emisiones. Además, se estima que a 2030 se eviten aproximadamente la emisión anual de 0,7 millones de toneladas de CO2eq.

Ambición 2050

La estrategia nacional a largo plazo se divide en dos periodos principales:

• Horizonte temporal anterior a 2030: El hidrógeno de bajas emisiones penetra únicamente en aquellas aplicaciones más competitivas. Este periodo destaca por una estrecha colaboración público-privada que habilitará y fomentará el desarrollo del mercado.

• Horizonte posterior a 2030: El hidrógeno es competitivo en un gran número de aplicaciones, lo que desencadena un gran aumento de la demanda tanto a nivel nacional como internacional. Durante este periodo comienza la exportación a otras geografías y se habilitan las aplicaciones de menor madurez tecnológica.

Hidrógeno azul

Potencial exportador

Colombia aspira a convertirse en un referente en la economía global del hidrógeno gracias a sus excepcionales recursos renovables y al decidido impulso del gobierno para favorecer su despliegue. Por ello, Colombia competirá en los mercados internacionales del hidrógeno de bajas emisiones, alcanzando en el largo plazo un potencial exportador equiparable a sus actuales exportaciones de carbón.

El hub de exportación de hidrógeno del Caribe podrá servir la demanda de hidrógeno en mercados situados tanto en el Atlántico como en el Pacífico. Este hub estaría estratégicamente situado, encontrándose cerca de Norteamérica, con salida directa hacia los mercados europeos a

través del Caribe y con acceso a los mercados asiáticos bien a través del canal de Panamá o desde los puertos colombianos del Pacífico previo transporte por ducto. Colombia también estaría idóneamente posicionada para servir las pequeñas demandas de hidrógeno que puedan desarrollarse en los países de América Central.

Demanda regional de hidrógeno

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