La biografía autorizada de Elon Musk, escrita por Ashlee Vance, revela que una de las preguntas que solía hacer el empresario en las entrevistas de trabajo para SpaceX era un acertijo: ‘Estás parado en la superficie de la Tierra. Caminas una milla hacia el sur, una milla al oeste y una milla al norte y terminas exactamente donde comenzaste. ¿Dónde estás?’.
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Según El Economista, esta era una de las cuestiones que Musk lanzaba a los candidatos durante las primeras contrataciones de SpaceX, que el multimillonario fundó en 2002. La respuesta es el Polo Norte, una solución que acertaban la mayoría de candidatos, en su mayoría ingenieros.
Ante esta situación, cuenta en su libro Ashlee Vance, el director general comenzó a hacer una segunda cuestión relacionada con el acertijo: «¿Dónde más podrías estar?». La solución a esta repregunta es el Polo Sur, en un punto en concreto donde la circunferencia de la Tierra se convierte en una milla.
Esta segunda solución es más compleja de alcanzar. Sin embargo, el autor relata que Elon Musk reconocía ver cómo un posible empleado describía el problema y su enfoque para resolverlo, independientemente de si llegaba a la resolución. «A Musk le gustaba guiarlos durante la resolución del problema», dice el libro.
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De acuerdo con El Economista, otra de las preguntas que suele hacer Elon Musk a los candidatos es: «Dime un problema al que hayas tenido que enfrentarte y cómo lo has resuelto», un truco que reveló en una ponencia para el World Government Summit. En ese foro explicó que esa pregunta es muy eficaz para saber si una persona está mintiendo o no. Pues si es verdad, lo explicará de manera detalla, aportando pequeños detalles.
Esta técnica de Musk está avalada por una investigación científica, que fue publicada por Journal of Applied Research in Memory and Cognition.
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En este estudio se reflexiona sobre esta técnica, denominada Gestión Asimétrica de la Información (AIM por sus siglas en inglés), y que pone de manifiesto que cuanto más extenso sea un discurso y más detalles se pueda aportar, mayor credibilidad se está dando a la experiencia.
Asimismo, el trabajo reveló que las personas que querían ocultar su culpabilidad no daban muchos datos para no ser descubiertas.
(Con información de El Economista)
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