El Institute of International Finance (IIF) presentó un análisis sobre la economía de México en el que detalló que el deterioro de la confianza en el país y el detrimento en el clima de inversión afectó el entorno empresarial y el crecimiento económico.
El IIF considera que la economía no ha podido crecer desde 2018 porque el deterioro de la confianza sofocó la inversión. Particularmente, ese año coincide con la llegada de Andrés Manuel López Obrador a la Presidencia, un sexenio que termina en tres años.
El Producto Interno Bruto (PIB) de México presentó un crecimiento promedio intertrimestral del 0,2 % entre 2018 y 2019, antes de la pandemia, un indicador que está por debajo del promedio del país, que es del 2,1 %. El Instituto considera que ese debilitamiento del desarrollo económico se explica por la caída de la inversión.
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En su revisión sobre la situación del país latinoamericano detalló que se registra un debilitamiento del clima empresarial, que también ha impactado el crecimiento del PIB, anotando una reducción en ese indicador de 0,5 puntos porcentuales entre 2017 y 2019.
La organización habla de un escenario de erosión del clima empresarial: “La ausencia de un entorno institucional estable que garantice la protección de los derechos de propiedad, controles y equilibrios adecuados y una mayor competencia en los mercados clave ha sido un obstáculo importante para la inversión en el período previo a la pandemia”, detalló en su informe.
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Hay dos elementos que inciden en la economía de México: factores externos como el nuevo tratado de libre comercio con Canadá y Estados Unidos (T-Mec) y la actividad de su vecino norteamericano, además de los asuntos internos de política monetaria y fiscal, a los que se suman las determinaciones del Gobierno de López Obrador.
El deterioro del entorno para los negocios alcanzó niveles máximos en los últimos tres años (ver gráfico). El IIF encontró una relación entre el deterioro de la inversión y la afectación de la confianza empresarial: antes de la pandemia, el crecimiento de la inversión se redujo 2,7 puntos porcentuales, lo que restó, al menos, 0,5 puntos porcentuales del crecimiento del PIB por año.
“Esperamos que las políticas sigan siendo intervencionistas después de las recientes elecciones de mitad de período (…) la falta de reformas implica que México podría volver a un estancamiento secular después de recuperarse del Covid-19”, escribió el IIF.
Morena, el partido de Andrés Manuel López Obrador, contó con la mayoría absoluta en el Congreso en los últimos tres años. Después de las elecciones legislativas de mitad de mandato, que se celebraron el pasado seis de junio, si bien perdió escaños, mantuvo la mayoría de las curules, lo que le permitirá sacar adelante sus reformas, pero limitaría que aplique cambios a la Constitución.
El Instituto considera que la incertidumbre va en aumento, lo que también ha afectado la inversión, la productividad y las exportaciones, en un contexto en el que “hubo políticas que obstaculizaron la participación del sector privado en la economía” y ve necesario brindar garantías a los inversores.
“Si bien nuestra línea de base de elecciones post-intermedias asume que se mantendrá la estabilidad macro, también implica que México podría volver a un estancamiento secular después del Covid-19”, concluyó el análisis del IIF sobre la situación de la economía de México.
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